Subidas a estas horas en las Bolsas europeas, tras un cambio en la dirección de la sesión, que abrió en negativo. Ayer registramos hasta tres giros en los índices, fruto de la falta de rumbo que existe en el mercado.
Desde el tres de mayo, los selectivos europeos se desenvuelven en un estrecho rango del 2-3% entre los máximos y los mínimos.
Algo parecido sucedió desde la segunda semana de marzo hasta el 4 de abril, cuando los índices europeos rompieron por la parte de abajo el rango de oscilación en el que cotizaban, que es exactamente el mismo en el que estamos ahora inmersos. La ruptura bajista fue efímera y, desde el 8 de abril, las Bolsas se recuperaron cerca de un 10% hasta tocar máximos anuales, para volver a caer y consolidar.
En total, en los últimos tres meses, desde el 24 de febrero, las Bolsas europeas han pasado cerca de la mitad del tiempo incrustadas en el actual rango de movimiento.
En Wall Street pasa algo bastante parecido. Por poner niveles concretos en los dos índices directores a ambos lados del Atlántico, el rango de oscilación del S&P500 está comprendido entre los 2.040 y los 2.080 puntos. El DAX alemán, cotiza entre los 9.800 y los 10.100.
Los indicadores de volatilidad están descendiendo a mínimos, que en algunos casos, se remontan a 2015. Por ejemplo, cogiendo el ATR a 14 periodos en el Ibex 35 (lo que nos daría el recorrido diario media entre los máximos y los mínimos del Ibex), estamos en mínimos desde abril del 2015.
Es imposible precisar cuanto más tiempo van a dormir los índices en la actual lateralidad. Pero lo que sí resulta muy probable es que, en el momento en el que se rompa el rango, el impulso que se forme en la dirección de la ruptura será bastante intenso, como ha ocurrido en otras ocasiones. Los traders e inversores tienen aquí una clara oportunidad de beneficiarse de un movimiento bastante previsible, que se está lavando en estos momentos.
Ayer Wall Street cerró son caídas moderadas, prácticamente insignificantes. El S&P 500 se dejó un 0,21%, mientras que el Nasdaq perdió un 0,08%.
La sesión en Asia ha sido bajista. El Nikkei ha caído un 0,9%, ante una nueva apreciación del Yen. La Bolsa de Shanghái ha caído cerca de un 0,8%, con su divisa cayendo.
En datos macroeconómicos, hemos conocido que el PIB de Alemania en el Q1 ha subido un 0,7%, hasta un ritmo interanual del 1,3%. Tenemos también una mala lectura del índice ZEW (6,4 cuando se esperaba 12), y que la Confianza empresarial de Francia queda en el 104 previsto.
Esta tarde en EE. UU. conoceremos las Ventas de viviendas nuevas del mes de abril a las 16:00. En resultados empresariales tendremos los resultados de Best Buy (NYSE:BBY) y HP (NYSE:HPQ).
En Europa, los bancos están teniendo un buen día, pese a la rebaja del rating de Moody´s a Deutsche Bank (DE:DBKGn). La rentabilidad de la deuda griega sigue descendiendo, celebrando la buena sintonía entre el Gobierno heleno y la Troika.
El EUR/USD sigue cayendo, y ya está claramente por debajo del 1,12, lo que es un factor positivo para las Bolsas europeas. La Libra también sube, a golpe de encuesta que muestra la ventaja de los no partidarios del Brexit.
En materias primas, el petróleo está más o menos estable, repitiendo los niveles de hace 24 horas.