Como ya hemos comentado durante esta semana, hoy es un día que perfectamente podríamos borrar del mapa bursátil para saltar directamente al lunes. Las negociaciones entre Grecia y el resto de la Unión Europea están tan estancadas a la espera del referéndum del domingo que probablemente nadie se atreva a mover ficha por miedo a quedarse en el lado malo del camino. Esto se traduce en unos movimientos mínimos en los principales índices europeos, que a estas horas no son capaces de definir dirección aunque sí muestran una cierta volatilidad.
Igual que el miércoles veíamos datos de PMIs manufactureros de junio, con resultados no especialmente boyantes, hoy asistimos a una nueva muestra de relajación económica, con la publicación de unos datos flojos de PMIs de servicios. Por ahora conocemos datos de España, Alemania y UE, de los cuales los dos primeros han salido por debajo de lo esperado en las previsiones (56,1 vs 58,0 y 53,8 vs 54,2, respectivamente) mientras que el dato de la UE se ha limitado a cumplir las expectativas, cifradas en 54,4 puntos por los analistas.
Desde luego, no son datos como para tirar cohetes y menos si nos damos cuenta de que, en el caso de España, es el segundo mes consecutivo en el que vemos PMIs que, no solo no cumplen las previsiones, sino que son directamente menores que los datos anteriores. De todas formas, para ser absolutamente justos, debemos ser conscientes de que el PMI suele presentar una cierta estacionalidad y en el caso concreto del de servicios, mayo y junio no han sido ni mucho menos unos buenos meses en comparación con el resto del año desde 2010. Con esto en mente, quizá sea más razonable ser paciente y ver cómo van evolucionando los marcadores en los próximos meses antes de sacar conclusiones sólidas, si bien el hecho de no cumplir expectativas suele ser un indicador negativo.
A las 11:00 conoceremos los datos de ventas minoristas en la zona euro, en los que se espera una caída importante desde el 0,7% hasta el 0,1%. Una vez más no es tan importante la evolución en sí misma sino batir las expectativas. Lo cierto es que viendo cómo han salido los PMIs de servicios no esperamos resultados muy diferentes en ventas minoristas pero siempre es interesante ver las cifras para hacerse una composición de lugar.
La conclusión para hoy en el plano macro, en general, es que probablemente a nadie le importe demasiado cómo sale un PMI sabiendo lo que está por llegar este fin de semana, por eso es poco probable que estos datos vayan a generar movimientos relevantes. No perdamos de vista los datos para el medio plazo sin embargo. Una vez que la tormenta griega amaine volveremos a oir hablar de indicadores macro sin duda.
Precisamente ayer conocíamos los datos del mercado laboral en EE.UU. Dijimos en el informe que las bolsas estadounidenses necesitaban algún aliciente para decidirse a abandonar los soportes pero parece que habrá que seguir esperando puesto que las nóminas no agrícolas no crecieron tanto como se esperaba, quedándose en +223k frente a las +230k previstas. Algún punto positivo tenía que tener el último día de negociación para las bolsas al otro lado del charco y éste vino en forma de tasa de desempleo. El dato del último mes fue de un 5,5%, se esperaba un 5,4% y sin embargo se superó esa previsión con un registro del 5,3%. Al final un punto positivo y otro negativo por lo que nos quedamos casi igual. Veremos si el lunes trae otros vientos que animen a los ralentizados índices americanos. Por ahora habrá que seguir esperando.