Con un número cada vez mayor de personas que se ven obligadas a trabajar desde sus casas, los datos sugieren que los ataques de ransomware están en su punto más alto, con la frecuencia de estos incidentes aumentando en un 45% sólo en el transcurso de abril de 2021. Y no solo eso, hay quien asegura que el aumento de los ataques de ransomware está estrechamente relacionado con el meteórico crecimiento del sector de las criptomonedas.
Además, en medio de la reciente actividad positiva del mercado de las criptomonedas, las noticias de que los reguladores de los Estados Unidos están estudiando agresivamente el vínculo entre las criptomonedas y el ransomware parece que están empañando un poco el estado de ánimo, especialmente porque varias agencias gubernamentales parecen ver el ransomware de criptomonedas como un gran problema que requiere una acción estricta.
A medida que la adopción de los activos digitales sigue extendiéndose por los Estados Unidos, parece que los legisladores están tratando de entender mejor cómo estas ofertas pueden ser utilizadas para una serie de fines legales e ilegales. Por ejemplo, la Ley de Divulgación de Rescates, presentada por la senadora Elizabeth Warren y la representante Deborah Ross el 5 de octubre, exige a las víctimas de ataques de ransomware que revelen al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) la información sobre los pagos de rescates a los que hayan tenido que hacer frente.