Madrid, 13 sep (.).- Los accidentes laborales causaron 406 muertes entre enero y julio, 12 menos que en el mismo periodo del año pasado, según los datos publicados por el Ministerio de Trabajo.
Los accidentes mortales se produjeron principalmente durante la jornada de trabajo, con 329 muertes, 17 menos que el año pasado; mientras que durante el trayecto sumaron 77, cinco más que en los siete primeros meses de 2020 cuando la pandemia paralizó una parte importante de la actividad.
Por actividades, los servicios son los que más accidentes mortales suman con 175 hasta julio; 20 más que el año pasado, seguidos de la construcción, con 64 muertes, 5 menos.
La primera causa de fallecimiento durante la jornada de trabajo siguieron siendo los infartos y derrames cerebrales con 125 accidentes, 1 menos que los registrados hasta julio de 2020.
En total, los accidentes laborales con baja (leves, graves y mortales) se incrementaron un 20,4 % entre enero y julio, hasta 317.258, mientras que los accidentes sin baja, subieron un 10,6 %, hasta los 317.804.
Dentro de los accidentes con baja, la mayoría, 275.901, se produjeron durante la jornada de trabajo, un 18,7 % más, y los restantes 41.357 "in itinere" -es decir, durante los traslados-, con un repunte del 33,3 %.
Con estos datos, UGT ha denunciado que "la vuelta a la actividad aumenta la siniestralidad" y pide derogar las reformas laborales y abrir una mesa de diálogo social para acordar medidas que pongan fin a esta situación.
UGT destaca, por ejemplo, las cifras de la hostelería, donde el índice de incidencia de los accidentes con baja en jornada de trabajo aumenta un 21,1 %, el incremento de muertos en accidente laboral del sector servicios o el alza de los accidentes "in itinere" tras el fin del teletrabajo en muchas empresas.