Investing.com – Por quinta semana consecutiva, los datos oficiales de inventarios de petróleo crudo en Estados Unidos vuelven a pillar con el pie cambiado a los analistas. En esta ocasión, las existencias estadounidenses registraron un sólido avance, frente al descenso previsto por el consenso del mercado.
Ni siquiera el incremento de las reservas adelantado ayer por el Instituto Americano del Petróleo (API) ha podido evitar la decepción entre los inversores, y la respuesta bajista del mercado ha sido prácticamente inmediata.
Según las cifras publicadas hoy por la Agencia de Información para la Energía (EIA) del Gobierno de Estados Unidos, las reservas de petróleo almacenado en el país del Tío Sam se incrementaron en 2,501 millones de barriles durante la semana finalizada el pasado viernes, 19 de agosto.
De este modo, las existencias de crudo en EE.UU. avanzan hasta los 523,6 millones de barriles, en contra de todas las expectativas del mercado, que aguardaban un retroceso de 455.000 barriles.
Asimismo, los inventarios de gasolina se incrementaron durante la pasada semana en 36.000 barriles, en contraposición al descenso anticipado por el mercado de 1,166 millones de barriles.
Del mismo modo, las existencias en el centro de almacenamiento de Cushing, Oklahoma, punto de entrega para los contratos de futuros, registraron también un nuevo avance, con un aumento de 375.000 barriles.
Así las cosas, la reacción del mercado no se hizo de rogar. Las ventas se impusieron rápidamente a las órdenes de compra llevando el precio a la baja más de 75 centavos de dólar.
Nada más conocer la noticia, la cotización del crudo ligero estadounidense se desplomó desde los 47,51, hasta los 47,08 dólares. Alcanzando este nivel en cuestión de segundos, el precio siguió bajando en la siguiente media hora, hasta marcar un mínimo diario en los 46,69 dólares.
El barril Brent europeo, por su parte, también sufrió en sus propias carnes la misma oleada de ventas que su homólogo estadounidense, con un salto inicial desde los 49,66, hasta los 49,20 dólares; para seguir cayendo a continuación hasta un mínimo intradía de 48,88 dólares por barril.