Investing.com – La cotización del crudo se preparaba para ahondar en las pérdidas de la sesión tras conocer el tercer avance semanal consecutivo de los inventarios en Estados Unidos.
Sin embargo, las oportunas declaraciones del ministro de Energía de Rusia, Alexander Novak, en las que ha mostrado su optimismo ante la posibilidad de que los estados de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) alcancen un acuerdo sobre la oferta el próximo 30 de noviembre, han conseguido contrarrestar por completo el efecto bajista del nuevo avance de las reservas de crudo, gasolina y productos destilados en EE.UU.
En concreto, según las cifras anunciadas hoy por la Agencia de Información para la Energía (EIA) del Gobierno de Estados Unidos, las reservas de petróleo en el país del Tío Sam se incrementaron en 5,274 millones de barriles, hasta los 490.3 millones durante la semana finalizada el pasado viernes, 11 de noviembre.
Este avance es incluso superior a los 3,65 millones de barriles publicado en la tarde de ayer por el Instituto Americano del Petróleo (API), y se sitúa muy por encima de los 1,48 millones previstos por los analistas.
Del mismo modo, las existencias en el centro de almacenamiento de Cushing, Oklahoma, punto de entrega para los contratos de futuros, registraron un nuevo aumento en 691.000 barriles.
También aumentaron los inventarios de gasolina, con una subida de 746.000 barriles, frente al descenso de 416.000 barriles esperado por los analistas, y suponen un gran contraste frente al retroceso de 2,841 millones de barriles registrado la semana precedente.
Asimismo, las reservas de productos destilados han avanzado en 310.000 barriles, contradiciendo las expectativas del mercado, que aguardaba una caída de 1,729 millones de barriles, en línea con el descenso de 1,948 millones de barriles vivido siete días atrás.
Nada más publicarse la noticia, los futuros sobre el crudo ligero estadounidense registraron un rápido movimiento a la baja, que hizo descender la cotización cerca de 30 centavos, desde los 45,43, hasta los 45,14 dólares por barril.
Tras tocar alcanzar este nivel, la materia prima rebotó con fuerza, alentada por las declaraciones del ministro ruso, para marcar un máximo intradía en los 46,38 dólares por barril.
Por su parte, el barril Brent también se ha montado en la misma montaña rusa, con una caída primero desde los 46,59, hasta los 46,38 dólares, para escalar después hasta a un máximo diario en los 47,54 dólares.