MADRID (Reuters) - El selectivo español cerró el jueves en verde extendiendo el rebote del día anterior, aunque la caída de Santander (MC:SAN) por su nuevo suspenso en las pruebas de resistencia en EEUU frenó el alza del índice español.
Tanto Santander, que cerró con una caída del 1,35 por ciento, como Deutsche Bank (DE:DBKGn) suspendieron los test de estrés de la Reserva Federal estadounidense por "amplias e importantes debilidades" en su proceso de planificación de capital, lo que castigó con fuerza a todo el sector.
Popular fue el valor que más cayó en el parqué español con un descenso del 4,0 por ciento, acompañado de Sabadell (MC:SABE) y Caixabank (MC:CABK), que retrocedieron un 1,42 por ciento y un 1,0 por ciento respectivamente.
BBVA (MC:BBVA), en cambio, consiguió cerrar en verde con un alza del 0,9 por ciento.
"Los test bancarios están lastrando mucho al sector, pero el resto del mercado sigue a la espera de ver cómo puede avanzar el tema del Brexit y la incertidumbre sigue demasiado presente", dijo Ángel Pérez, analista de Renta 4 (MC:RTA4).
El Ibex-35 cerró con una subida del 0,72 por ciento a los 8.163 puntos, mientras que el índice paneuropeo FTSEurofirst 300 avanzó un 0,83 por ciento.
Entre los grandes valores, Telefónica (MC:TEF) subió un 1,57 por ciento, Inditex (MC:ITX) creció un 0,33 por ciento e Iberdrola (MC:IBE) se anotó un alza del 2,47 por ciento.
Repsol (MC:REP) también cerró en positivo con una subida del 1,15 por ciento a pesar de que el barril de Brent cayó casi un 2 por ciento y se quedó en los 49 dólares
Los valores más destacados de la jornada fueron Indra (MC:IDR), que creció un 3,83 por ciento, junto con Gas Natural (MC:GAS) y Grifols (MC:GRLS), que avanzaron un 3,33 por ciento y un 2,97 por ciento.
FCC (MC:FCC) creció un 0,06 por ciento, lo que colocó el valor de su acción en los 7,59 euros, muy cerca de la contraprestación ofrecida en la opa aprobada ayer por la CNMV sobre el 100 por cien de la compañía.
Fuera del selectivo, las acciones de clase A de Abengoa (MC:ABGek) rebotaron más de un 45,4 por ciento y las de clase B crecieron un 57,4 por ciento, continuando con su gran volatilidad el día en el que la compañía celebra una junta de accionistas.