GOMA, 13 jun (Reuters) - Los rebeldes del conocido como M23 de la República Democrática del Congo se han apoderado de la ciudad oriental de Bunagana, en la frontera con Uganda, según informaron el lunes activistas locales, en un revés para las fuerzas congoleñas, que habían dicho un día antes que habían forzado la retirada de los insurgentes.
Bunagana fue un bastión del M23, o Movimiento 23 de Marzo, durante la insurrección de 2012, durante la que el grupo rebelde se apoderó brevemente de la importante ciudad de Goma antes de que las fuerzas congoleñas y de la ONU los expulsaran hacia las vecinas Ruanda y Uganda al año siguiente.
La ciudad está a unos 55 kilómetros al noreste de Goma y es uno de los principales pasos fronterizos con Uganda.
"Ya estamos bajo el control del M23", dijo el lunes a Reuters desde Bunagana el presidente de un grupo de la sociedad civil local, Jean-Baptise Twizere.
"Los soldados congoleños que se encontraron rodeados de enemigos en Bunagana no pudieron hacer nada, y desde las 11 de la noche (del domingo) han abandonado la ciudad", dijo.
Edgard Mateso, vicepresidente de un grupo de defensa de los derechos civiles de la provincia de Kivu del Norte, confirmó la toma de la ciudad por el M23.
El general Sylvain Ekenge, portavoz del Gobierno militar de Kivu del Norte, dijo que aún no tenía ninguna información y que estaba de camino a la zona.
La oficina del gobernador de la provincia dijo el domingo que las fuerzas congoleñas habían "derrotado" al M23, tras unos ataques a primera hora de la mañana cerca de Bunagana, en la que murieron varios combatientes.
Las autoridades congoleñas acusaron el domingo a los soldados y la artillería ruandeses de apoyar el ataque del M23 en Bunagana. Ruanda ha negado en repetidas ocasiones haber respaldado la última ofensiva de los rebeldes, que comenzó el mes pasado.
La violencia en Bunagana hizo que más de 25.000 personas huyeran de la zona, con miles de personas escapando a la vecina Uganda, dijo el domingo Naciones Unidas.
(Reporte de Djaffar Sabiti y Erika Mwisi; redacción de Sofia Christensen; edición de Aaron Ross y Alison Williams; traducción de Darío Fernández)