Se espera una apertura algo confusa, pues estamos en resistencias fuertes y no tenemos muy claro el resultado final de mezclar el dato de empleo de mayo, con una Reserva Federal (Fed) que puede esperar a subir los tipos. Tener crédito barato más tiempo es un aliciente para el riesgo, pero no lo es ver una situación del mercado laboral preocupante, aunque sea sólo por un dato puntual.
Nos adentramos en la segunda sesión de la semana en los mercados norteamericanos y ya tenemos un poquito más lejos el dato de creación de empleo del mes de mayo que resultó nefasto, pero la preocupación ha sido sustituida por los comentarios de la presidenta de la Reserva Federal en el día de ayer en donde reconoce la preocupación del mismo, sigue pensando en un buen tono de la economía estadounidense, pero evita hablar de fechas para subir los tipos de interés, lo que es interpretado por el mercado como una señal explícita de que no va a haber subidas de tipos en el mes de junio.
Por un lado, tenemos más incertidumbre porque seguimos preocupados por el camino que va a tener esa esperada subida de tipos de interés durante 2016 y que todavía no hemos visto, pero por otro existe también preocupación por el aspecto macroeconómico, pues ese dato tan malo de creación de empleo es algo que no tocaba tener en estos momentos.
Precisamente, la productividad del primer trimestre se ha revisado y ha mejorado con respecto al -1% anterior, aunque se mantiene en negativo descendiendo -0,6%. Además, los costes laborales han subido más de lo esperado y es un punto a favor de la inflación, por lo que en cierto sentido, seguimos moviéndonos en el filo de la navaja.
Por lo tanto, la Reserva Federal ayer dijo que los tipos de interés dependían de los datos, así que cada vez que aparezcan datos macroeconómicos nuevos, se mirará con lupa para saber si hay algún momento adecuado para que la Reserva Federal se tire la piscina o siga dejando pasar el tiempo.
Lo cierto es que los mercados ven la posibilidad de disfrutar unas cuantas semanas más de unos tipos de interés bajos, lo que significa disponer de crédito barato, y eso está siendo aprovechado por todos para tener una cierta mejoría, aunque se esté viendo más en Europa que en Estados Unidos, pues hemos tenido unos datos de producción industrial en la zona euro y un producto interior bruto final del primer trimestre en la zona euro que han quedado muy bien, y eso se tiene que notar.
Por otro lado, estamos en la semana posterior al dato de creación de empleo, no tenemos demasiadas cosas que llevarnos a la boca que pueden mover al mercado, así que lo principal es la idea de que los tipos de interés sigan bajos junto con datos que puedan reforzar la idea de que la economía de Estados Unidos no es lo que parece.
Las materias primas han sido de las más beneficiadas esta mañana por la idea de no tener subidas de tipos de interés, aunque el dólar ha dejado de debilitarse de forma abrupta y los beneficios han sido más descontados por el sector de recursos básicos y de petróleo que por las propias materias primas en sí, por lo que debemos estar atentos a la reacción que pueden tener esos sectores en Estados Unidos, ya que ayer el de energía y materiales fueron de los mejores.
Debemos ser plenamente conscientes que Estados Unidos está en resistencias. El S&P 500 está rondando los 2.100 puntos y además el Nasdaq está atacando los máximos anuales, situación muy peligrosa porque podemos tener movimientos de corto plazo que hagan creer una cosa y ser lo contrario en el medio plazo, precisamente por tener una ventana de unas pocas semanas en donde no vamos a tener subida de tipos pero quizá sí lo tengamos dentro de unas semanas, así que el horizonte de los movimientos es más corto de lo normal porque todavía seguimos teniendo mucha incertidumbre.
Vean aquí como está el Nasdaq:
Por lo que respecta al S&P 500, estamos por encima de los 2100 puntos, el MACD de la volatilidad está bajista, algo que apoya los activos de riesgo, pero el RSI del futuro del S&P 500 no tiene la misma fuerza que cuando marcamos los 2.100 como resistencia a principios del segundo trimestre de este año, por lo que esta falta de fortaleza es lo que más preocupa, pues podemos incluso subir todavía más alto y seguir manteniendo una cierta divergencia bajista, algo que va de acuerdo con esa ventana positiva para los activos de riesgo en forma de aplazamiento de la subida de tipos de interés.
En valores concretos tenemos:
- Hertz (NYSE:HTZ) tiene un problema porque Carl Icahn ha subido su participación en la compañía hasta el 15,24%, así que todo el mundo está expectante a ver cuál es la petición que hace a los directivos que haga que su posición gane dinero en el corto plazo.
- Biogen (NASDAQ:BIIB) puede tener problemas ya que no ha tenido resultados positivos de un nuevo fármaco contra la esclerosis múltiple.
- Ralph Lauren (NYSE:RL) tiene problemas serios porque en el fuera de horas está cayendo cerca del 10% y ha dicho que espera que las ventas netas para su primer trimestre fiscal se reduzcan tanto las ventas como el margen operativo por cierre de tiendas en Estados Unidos y además poco tráfico en las mismas.