Seguimos sospechando que los mercados están infravalorando la probabilidad de un ajuste de la política monetaria del Banco de Inglaterra (BoE). Sospechamos que, al igual que con la Reserva Federal (Fed), el umbral de supresión de las medidas de emergencia es significativamente menor que las subidas de tipos estándar. Si bien los tipos de interés del Reino Unido nunca fueron negativas, es difícil para los miembros del Comité de Política Monetaria (MPC) justificar la política excesivamente flexible dado el momentum económico. El discurso en Mansion House de Carney, gobernador del Banco de Inglaterra, hizo mella en nuestras expectativas de un alza de tipos en 2017.
Sin embargo, el economista jefe del Banco de Inglaterra, Haldane, indicó que los datos marginales sugerirían alzas en el segundo semestre (más probablemente en noviembre). Esta no es la primera vez que la opinión de Haldane difiere de la del MPC, pero pondrá a los mercados en alerta por los cambios en los moderados Broadbent y Vlieghe y la mejora de los datos.
Los mercados ahora están descontando alzas de doce puntos básicos a finales de 2017. Para materializar nuestra visión constructiva sobre el GBP, consideramos que las posiciones largas en GBP/CHF son lo ideal.