Los datos macro publicados la pasada semana resultaron débiles y por debajo de estimaciones, podrían incluir una parte preliminar de los efectos del huracán Harvey según informan algunos expertos.
La producción industrial, por ejemplo, cedió casi un punto porcentual en agosto, frente al +0,1% esperado, debido en alguna medida a los cortes de electricidad y cierre forzado de plantas productivas causados por las tormentas.
La utilización de la capacidad productiva también cayó hasta el 76% o las ventas al por menor cedieron un 0,2%, frente al +0,1% esperado.
Es aún temprano para evaluar el impacto final de Harvey, e Irma, a medida que avanzan los cálculos aumenta la cifra estimada de daños y ahora se calcula que sólo Harvey podría ascender hasta cerca de 90-100.000 millones de dólares.
El impacto en crecimiento económico es también pronto para ser concretado y aunque la región de los Cayos y Florida en general han sufrido mucho, el impacto real en el conjunto de la economía de Estados Unidos no debería ser mayor.
El mayor contribuyente al crecimiento de la economía en Florida es el sector servicios (financieros, seguros, alquileres, industria vacacional), y por tanto la merma en producción industrial derivada de Florida tiene un impacto menor.
El PIB de Florida el año pasado fue de 926.800 millones de dólares, el cuarto mayor del país, frente a cerca de 18.569.000 millones del conjunto de la economía y sin embargo, los registros de PIB en tiempo real calculados por la Reserva Federal de Atlanta -GDPNow- han caído con fuerza desde el 4% de principios de agosto hasta el 2,2% del pasado jueves.
Conociendo el comportamiento del indicador de PIB en tiempo real, no se puede afirmar aún que refleje el impacto de los huracanes, es una imagen normal. Cada trimestre el GDPNow comienza con lecturas del 4% o 4,5% que son paulatinamente revisadas a la baja, igual que ha sucedido ahora.
Los últimos datos macro de EE.UU., peor de lo esperado, han presionado a la baja los índices de sorpresas económicas, evaporando la ligera recuperación de los meses centrales del verano, hasta mínimos del año
El Estado de Texas resultó también afectado por los huracanes aunque en mucha menor medida. Texas sí aporta más que Florida a la economía estadounidense con un PIB cercano al billón y medio de dólares, menos del 10% del total.
Las ventas al por menor subyacentes, excluyendo la partida de autos, consiguieron mejorar un tímido 0,1% en agosto, vean gráfico comparativo de evolución del dato de ventas y su subyacente
La falacia divulgada desde Wall Street sobre que los desastres naturales son positivos para la economía choca con la realidad y el sentido común. De ser así, gestionar la economía sería tan sencillo como emplear a la fuerza laboral de medio país en el desarrollo y construcción y a la otra media en esperar al final de los proyectos para demolerlo todo... Y vuelta a empezar.
Habrá daños irreparables, otros muy costosos y mucho tiempo para que la actividad económica y productiva retorne a la normalidad, eso es pérdida efectiva de PIB.
Sin embargo, ciertamente habrá un repunte en las ventas de artículos varios como muebles, material de construcción, coches o electrodomésticos y podrían impulsar el PIB del cuarto trimestre, contrarrestando en alguna medida las importantes pérdidas causadas por Harvey e Irma.
Las aseguradoras no tendrán la misma suerte y sufrirán un impacto serio en sus cuentas. Más de la mitad de los daños no están asegurados de forma que los ciudadanos se enfrentan a gastos extraordinarios, e impacto positivo en los sectores antes citados, pero supondrá un fuerte recorte en otros sectores como los de restauración, ocio o en general consumo discrecional, el considerado no esencial.
Con este telón de fondo macroeconómico y Corea del Norte lanzando nueva prueba balística, con un misil sobrevolando Japón, las bolsas cerraron la semana al alza, con el Dow Jones conquistando nuevos máximos históricos y registrando el mejor comportamiento semanal del año.
El Dow cerró el viernes un 0,3% al alza en su 39 récord histórico de este año, para completar la mejor semana del año subiendo un 2,2%.
El Dow Jones de Transportes recuperó también posiciones la semana pasada aunque de manera leve sin superar máximos previos. Permanece estancado y cotizando en la zona de máximos alcanzada en noviembre de 2014, cuando alcanzó los 9.310 puntos.
El viernes cerró en 9.546, habiendo subido un 2,5% desde noviembre de 2014, frente al 25% que ha subido el Dow Jones de Industriales. ¡Gran divergencia bajista!
La semana de vencimiento trimestral ha quedado atrás y esta hoy comienza presenta sesgo tradicionalmente bajista que convendrá vigilar estrechamente, ante la cercanía de referencias técnicas de control técnico que atacadas con éxito podrían quebrar pautas en vigor de distintos índices y elevar la tensión inversora.
En otro orden de cosas y activos, el crudo West Texas consiguió estabilizarse con rapidez tras los huracanes, en línea con la estacionalidad propia del mes de septiembre y con nuestros pronósticos transformados en estrategia que ya acumula una rentabilidad superior al 11%.
Una estrategia realmente sencilla de aplicar y sin apenas riesgo, diseñada sobre la base de un ETF que replica el precio del crudo apalancado, vean:
El crudo presenta un aspecto técnico muy apropiado para continuar recuperando posiciones y subir adicionalmente en busca de la zona estimada objetivo más probable.
El oro, por su parte, parece haber concluido su impulso alcista de julio-agosto y de acuerdo con las estimaciones explicadas anteriormente: “terminó la sesión del viernes en tablas y después de dibujar una pauta técnica de “vuelta en un día” que podría ser confirmada con las caídas de hoy y enviar el precio de vuelta hacia el entorno 1.270 dólares por onza, al menos”.
El post del día 12 de septiembre también insistió abundando en la idea de esperar caídas del oro: “Cuidado con los supuestos activos refugio, tanto el bitcoin como el oro presentan un comportamiento (reservado suscriptores) y un posicionamiento COT, el oro, apropiado para aumentar la cautela. Pueden causar algún dolor de cabeza”.
La vuelta en un día fue confirmada y el precio ha caído desde 1.360 hasta los 1.320 actuales. El aspecto técnico es débil y proyecta caídas adicionales que dependiendo de su profundidad, pauta técnica desarrollada y demás lecturas podría configurarse como oportunidad para acumular posiciones de cara a un posible repunte.
Las estrategias abiertas con bonos, índices o dólar mantienen buen aspecto técnico y estacional, así como escenarios muy favorables para próximas semanas.