- Las expectativas de mayores beneficios por la reforma fiscal motivaron subidas en EE.UU.
- Trump podría retrasar la firma de la reforma fiscal para no afectar al programa federal de seguro médico.
- Datos macro mixtos con un aumento del índice manufacturero y un menor aumento del PIB del previsto.
- Los bonos americanos corrigen después de haber alcanzado el máximo de 9 meses.
- Fuertes caídas en el bitcoin y otras criptomonedas.
El mercado americano cerró ayer en positivo: el optimismo de la reforma tributaria se extendió a través de los sectores de energía y los bancos, gracias a las expectativas de los inversores de que los dos sectores mejorarán sus beneficios en un entorno de impuestos corporativos más bajos, que pueden motivar el aumento de compra de acciones y gastos de capital.
El Dow Jones subió un 0,23% hasta los 24.782,29. El S&P 500 un 0,20%, el Nasdaq cerró a 6.965,36 puntos, aumentando el 0,06%, mientras que el más beneficiado fue el Russell 2000 con una subida del 0,44%.
Los informes sugieren que el presidente Donald Trump podría retrasar la firma de la factura tributaria, que propuso un recorte en los impuestos corporativos del 35% al 21%, ya que activaría la provisión Pay Your Go (Paygo), lo que desencadenaría un recorte de 25 billones de dólares en Medicare (programa federal de seguro médico para personas mayores de 65 años, jóvenes con incapacidad y personas con enfermedad renal) que permitiría compensar la nueva carga de la deuda derivada de los recortes de impuestos propuestos.
Los inversores tuvieron datos contrapuestos. Por un lado aumentaba el índice manufacturero de la Fed de Filadelfia que subió a una lectura de 26,2 en diciembre, desde 22,7 en el mes anterior, pero en cambio, el crecimiento económico general en el tercer trimestre se quedó por debajo de las previsiones.
El Departamento de Comercio dijo que el producto interno bruto (PIB) del tercer trimestre se expandió a una tasa anual del 3,2%, cuando las previsiones de los economistas era de un aumento del 3,3%, aunque el dato quedaba por encima del crecimiento del 3,1% en el segundo trimestre y supone el aumento más rápido desde el primer trimestre de 2015.
Los mercados asiáticos disfrutaron de una sesión final predominantemente alcista antes de Navidad, con los mercados chinos representando el único atípico en medio de las ganancias en Japón, Hong Kong y Australia. Las acciones de la región de Asia-Pacífico tomaron señales de Wall Street. Por su parte, el Hang Seng de Hong Kong sumó un 0,3%, mientras que el índice de Shanghai cayó un 0,1% y el índice China A50 cayó un 0,42%.
Las acciones australianas (S&P/ASX 200) avanzaron un 0,15%, el Kospi surcoreano subió un 0,44% y el Nikkei japonés subió un 0,16%.
El dólar se mantuvo estable en 113,370 yenes, con su índice frente a una cesta de seis monedas principales, subiendo un 0,1% hasta 93,392.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro subieron a principios de esta semana después de que el Congreso aprobara una revisión del código tributario estadounidense que se esperaba que elevara el crecimiento económico pero que agregue al menos 1 billón de dólares a la deuda nacional en 10 años, pero ayer retrocedió levemente hasta 2,482% después de haber cotizado por encima de 2,50% el miércoles, el nivel máximo de nueve meses.
En materias primas, los futuros del crudo estadounidense cayeron un 0,3% hasta los 58,20 dólares por barril ya que los operadores vendieron para ajustar las posiciones antes de fin de año. Durante la noche, la cotización alcanzó un máximo de nueve meses, los 58,38 dólares con noticias procedentes de la OPEP que comenzó a trabajar en planes para salida de su acuerdo que mantiene vigente para recortar los suministros de crudo, lo que daba esperanzas para pensar que no terminarán radicalmente los recortes de suministro.
El Brent bajó un 0,15% hasta los 64,81 dólares el barril después de haber cerrado el jueves en 64,90 dólares el barril, su nivel más alto desde junio de 2015.
Las materias primas han subido esta semana, el cobre en la Bolsa de Metales de Londres alcanzó un máximo de dos meses el jueves y elevó al dólar australiano hasta los 0,7818 dólares, su nivel más alto desde el 2 de noviembre.
La volatilidad durante la noche fue más pronunciada en el espacio de la criptomoneda, donde el bitcoin, el bitcoin Cash y el ethereum perdieron alrededor de un 30% desde su pico. La criptomoneda, cotizaba en alrededor de 1.000 dólares al comienzo del año, el pasado domingo hizo máximos históricos en el valor de 19.666 dólares y en estos momentos cotiza en los 13500 puntos después de haberse apoyado en los 12.500 puntos en primera instancia.