Esta semana podría haber empezado hablando de los datos fuertes de inflación en Estados Unidos durante la semana pasada, o del plan de infraestructuras de Donald Trump para gastar más de 200 billones en Estados Unidos. O de cómo el Banco Central de Japón planea responder al encarecimiento del yen frente al dólar de los últimos meses.
Sin embargo, quiero compartir con el lector algo más trascendental. Quiero hablarle de los cambios que está experimentando la naturaleza del dinero y cómo esos cambios significan una transición hacia un nuevo modelo monetario que se impondrá para las próximas décadas.
Contradicciones de las criptomonedas
Es contradictorio que mientras unos gobiernos prohíben el empleo del bitcoin, otros gasten millones investigando las criptodivisas como es el caso de varias universidades en Estados Unidos.
Es contradictorio que mientras el Banco Internacional de activos BIS, exponente máximo de bancos centrales, ha hablado hace pocos días del bitcoin como una estafa y que debe ser desmantelado, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, también días atrás haya dicho que no le sorprendería que fuese uno de los activos de depósito en los bancos europeos del futuro.
Es contradictorio un magnate como George Soros se refiera al bitcoin como la moneda de los dictadores, y que uno de sus fondos de inversión sea el tercer mayor accionista de Overstock (NASDAQ:OSTK), una compañía norteamericana del tipo Amazon (NASDAQ:AMZN) que ha abandonado su negocio retail para dedicarse a la tecnología blockchain tras ser de las primeras compañías en aceptar bitcoins como medio de pago. Su propietario Patrick Byrne le dijo a la Fox que la tecnología blockchain era el mayor descubrimiento tecnológico de la humanidad.
Jugada maestra: Hacia los "cripto bancos centrales"
Con las contradicciones anteriormente citadas ya no es descartable el siguiente escenario. Los bancos centrales que han generado el campo de cultivo actual para la pérdida de credibilidad en las monedas físicas en favor de las criptodivisas, podrían tarde o temprano asumir que el empleo de sus propias criptodivisas mejoraría el control fiscal de la población, asesinando para siempre el fraude impositivo y el blanqueo de capitales.
Una pista de ello es que hace tiempo el Washington Post publicó un articulo donde un profesor universitario hablaba de que si el bitcoin era grande el "Fedcoin" sería mucho mayor.
El Deutsche Bank (DE:DBKGn) también ha realizado un informe al respecto considerando la posibilidad de que el Banco Central Europeo pudiese emitir en algún momento "criptoeuros". Este informe señalaba las ventajas revolucionarias que ello implicaría. Para empezar, actualmente la mayor parte del dinero que se emplea en Europa está digitalizado en forma de tarjetas de crédito en nuestros bolsillos, los medios de pago actuales tipo PayPal (NASDAQ:PYPL) cargan contra cuenta bancaria o nuestra tarjeta. Y si una población ya acostumbrada al uso del dinero digital tuviera acceso a dinero emitido digitalmente por el propio Banco Central Europeo sin pasar por líneas de crédito de otros bancos, reduciendo los riesgos de insolvencia de las entidades y abaratando los costes para su uso por parte de los consumidores, podría resultar una solución optima. Los consumidores podrían elegir incluso ahorrarlo en esa criptodivisa emitida por el Banco Central o elegir tipos de interés más atractivos a través de bancos como los actuales donde depositar su ahorro.
Este informe hacía nincapié en un aspecto: es fundamental para que tenga éxito esta iniciativa confianza plena en las instituciones monetarias. Si este escenario se da, es muy posible que el consumidor prefiera la comunidad y la seguridad de este tipo dinero al anonimato de las criptodivisas descentralizadas. Sin embargo la crisis bancaria que hemos vivido se conoce en el sector tambien bajo el nombre de "crisis de confianza" y los bancos centrales parecen haber perdido parte de la autoridad que en el pasado inspiraban a los mercados.
Como le decía al principio, asistimos a una transición en toda regla del sistema monetario actual, el dinero en efectivo está muerto y enterrado se lo que pase con las criptodivisas.