Hemos asistido a una mañana remarcable para la moneda única, con una subida del 1% hasta 1.3250. Ha contribuido a este último spike la debilidad del dólar que pierde interés en este brote de apetito por el riesgo. Otras divisas high-beta como el AUD, kiwi o el NOK también suben alrededor de un 1% hoy. Una vez más, las cobertas en corto de los Hedge Funds y Traders han sido un factor mayor detrás de las compras de euros. Junto a eso, el euro se ha beneficiado del optimismo derivado de que los ministros europeos están ya cerca de alcanzar un acuerdo en un segundo paquete de rescate sobre Grecia. Incluso el ministro de Finanzas alemán ha sido citado esta mañana afirmando que un acuerdo ha sido alcanzado, aunque de modo privado es casi seguro que continúa muy escéptico. Los políticos alemanes fueron informados estas últimas semanas que los oficiales esperaban realizar el swap de deuda entre el 22 de Febrero y el 9 de Marzo.
Como siempre, las expresiones de optimismo antes de una reunión de los líderes europeos deben ser descontadas ya que el resultado es casi sirmpre decepcioante. Existen todavía muchas cuestiones sin resolver por lo que sería realmente noticiable que se resolvieran hoy. Dado que el importe que Grecia requeriría continúa expandiendose cada día, asitimos a una nuevo planteamiento en el que los bonistas privados deberían aceptar un descuento aún mayor que el ya masivo al que accedieron hace 2 semanas. El BCE continúa argumentando que sus bonos no debieran estar sujetos a ningún tipo de descuento, a pesar de la sugerencia del FMI de que sí deberían. Además, la idea de que de alguna manera, los beneficios futuros del BCE en los bonos griegos pudieran ser mágicamente distribuidos al Gobierno griego es , al mismo tiempo, una alquimia financiera y un atraco al contribuyente, en el peor de los casos. Mientas tanto, Grecia debe imponer cláusulas de acción colectivas en todos los bonos para el caso de que el swap voluntario no alcance el soporte necesario entre los tenedores privados de bonos.
Grecia continúa siendo un espectáculo dantesco sin visos de solución. Sin embargo, con los inversores más inclinados a afrontar riesgos, apoyándose en las noticias económicas provenientes de las economías más avanzadas, Grecia no está atemorizando a aquellos más propensos a tomar riesgos tal y como hizo el año pasado.