Aun siendo optimista de cara al comportamiento de la renta variable de cara a próximos meses, a estos niveles no recomendaría aumentar exposición de forma significativa. A ambos lados del Atlántico aparecen ya importantes resistencias que dificultan la continuidad de las alzas originadas en los mínimos de la semana de Navidad.
Sin perjuicio de que las subidas podrían tener continuidad en próximas sesiones, en el caso de Wall Street hacia máximos históricos, la bolsa europea es caso aparte, el ratio rentabilidad/riesgo ya no es atractivo a estos niveles. Sin ir más lejos, el propio Dow Jones Industriales se ha revalorizado desde los mínimos de diciembre un 20% y se encuentra a menos de un 4% de sus máximos históricos, por lo que podríamos decir que, prácticamente, el actual segmento está completo. Para que tome cuerpo un ataque a los 26.950 puntos debe de superar en primera instancia los 26.040 puntos que presiona al cierre de la semana. Ese posible tramo adicional podría ser un último latigazo alcista, probablemente fruto de la liquidez que no ha confiado hasta ahora en el rebote tras la fuerte corrección vista en el último trimestre del año, y que podría incorporarse a última hora por el miedo a quedarse al margen de la fiesta.
Una media de 55 sesiones y el diferencial de su cotización en % con respecto a ella nos muestra que, en las últimas correcciones importantes (2011 – 2016 y 2018), se alejó prácticamente lo mismo, del entorno de -10/12%. Sólo en el suelo de 2009 se alejó más allá de ese nivel. Ahora en sentido positivo, este diferencial se encuentra próximo al entorno resistivo del +7/8%, nivel en el que reiteradamente ha venido encontrando dificultades para seguir avanzando. También solo fue superado este nivel tras formar el suelo en 2009 en el primer gran tramo alcista.
Aún podría seguir ascendiendo manteniendo el diferencial y consumiendo tiempo sobre la banda superior del canal ascendente que les muestro en el chart adjunto, una especie de canal de Keltner con algunas modificaciones propias y 4 ATRS, pero a estos niveles parece tener poco sentido comprar sin que se ajuste la sobrecompra.
En precio parece evidente que nos encontramos en niveles de sobrecompra, pero no en tiempo. Considero un error valorar la sobrecompra solo en cuanto al factor precio y no hacerlo en tiempo. Desde mínimos han transcurrido 40 sesiones, y sobre su media de 55 sesiones sin tener contacto o aproximarse a ella lleva 17 sesiones, por lo que aún no podemos hablar de sobrecompra, y podría seguir ascendiendo más de 55 sesiones sin converger, por lo que en este sentido podría tener margen para seguir ascendiendo hasta máximos.
Mi recomendación sería esperar con toda la paciencia del mundo a que se produzca al menos una aproximación a dicha media que actualmente discurre por los 24.400 puntos, o una corrección de cuanto menos el 38,2%, antes de aumentar de nuevo la exposición a bolsa significativamente, confiando en la continuidad de la tendencia alcista en Wall Street sobre los máximos previos y un rebote mayor en Europa en próximos meses.