El nombramiento de Jerome Powell como el próximo presidente de la Reserva Federal no fue una sorpresa. El índice del dólar se estancó dentro de su rango semanal, entre 94,4 y 95. Donald Trump, indudablemente, eligió la mejor opción de la estabilidad y la continuidad mediante la elección del republicano presidente de la Fed de Nueva York.
El USD cayó ligeramente después del anuncio, ya que los inversores descuentan por completo el riesgo de que un candidato de línea más dura reemplace a Yellen. Del mismo modo, los rendimientos de los bonos de Estados Unidos perdieron algo de terreno ayer, especialmente en el extremo largo de la curva. El bono a 10 años disminuyó a 2,35 %, mientras que el bono a 30 años volvió a 2,83 %.
Hoy viernes se publicarán las nóminas no agrícolas y probablemente tengamos algo de acción tras la lectura decepcionante del mes pasado. Se espera que las nóminas no agrícolas lleguen a 313.000 en octubre después de contraerse por 33 000 en septiembre.
Como de costumbre, los inversores tendrán que prestar una gran atención al crecimiento salarial, ya que se anticipa que las ganancias medias por hora registren un aumento del 2,7 % interanual frente al 2,9 % en septiembre. La publicación del informe de empleo de septiembre será nuestra mejor y última oportunidad para conseguir algo de volatilidad esta semana.
Por desgracia, el mercado está más enfocado en los desarrollos del plan fiscal de Trump, ya que tendrá un mayor impacto sobre la inflación y el crecimiento, en caso de ser aprobado. Además, los inversores se dieron cuenta de que un mercado de trabajo más fuerte no garantiza de ningún modo presiones inflacionarias sostenidas.