Lo dice la Reserva Federal de San Luis. Volatilidad por partida doble, en lo monetario y en lo estrictamente bursátil. Además, los ciclos económicos en las economías emergentes son sustancialmente más volátiles que en los países desarrollados, como se ilustra en la siguiente figura. Comprender las fuerzas que explican esto es una pregunta fundamental y abierta en economía internacional. En el documento “Trade in Commodities and Business Cycle Volatility,” los coautores, David Kohn y Håkon Tretvoll, y yo, Fernando Leibovici, estudiamos el papel de las diferencias estructurales en los patrones de producción y comercio internacional entre economías emergentes y desarrolladas en la contabilidad del mayor volatilidad del ciclo económico de las economías emergentes. Un asunto de máxima actualidad. Primero, por el nuevo ajuste del FMI a Argentina y ahora, con la pasión turca. Sí, Turquía, 1994, 2001, 2018 o cómo la historia se repite.
Hay, no obstante, opiniones contrarias: Los mercados emergentes han fortalecido significativamente su resiliencia económica y financiera en los últimos años. Las cuentas corrientes son en su mayoría más saludables con excepción de Turquía. Déficit de la cuenta corriente turca en el peor nivel en 5 años. (Gráfico vía Goldman Sachs (NYSE:GS))
Turquía, 1994, 2001, 2018 o cómo la historia se repite
1994, 2001, 2018: el mismo pecado original una y otra vez. Las empresas y los bancos de Turquía han soportado un atracón de préstamos de dólares y euros, por lo que una crisis monetaria se transforma en una crisis de endeudamiento y deudas. Añadan que Erdogan y Turquía ya están al límite.
Un gráfico vía Holger Zschaepitz @Schuldensuehner