El fuerte repunte de las acciones de las empresas que ofrecen las innovadoras vacunas para proteger contra el coronavirus está mostrando signos de tocar techo.
Las acciones de Moderna (NASDAQ:MRNA) cerraron ayer con una caída de casi el 18%, después de que las ventas y los beneficios de la empresa no cumplieran ni de lejos los objetivos de los analistas. Moderna, con sede en Massachusetts, ha dicho a los inversores que sus ventas de vacunas alcanzarían los 15.000-18.000 millones de dólares en 2021. Anteriormente, la empresa había dicho que había firmado acuerdos por 20.000 millones de dólares en ventas de vacunas previstas para 2021.
En un comunicado, Moderna ha dicho que los plazos de entrega más largos de los pedidos internacionales podrían posponer algunas entregas hasta 2022. La compañía ha citado un "impacto temporal" mientras intenta ampliar su capacidad para llenar y terminar los viales de las vacunas.
Las acciones de Moderna, que cerraron ayer en 284,02 dólares, han perdido una cuarta parte de su valor durante los últimos tres meses y más del 40% desde que registraran máximos históricos en agosto. Pfizer (NYSE:PFE), otro gigante mundial de las vacunas, apenas se ha movido durante los últimos tres meses.
Incluso antes del revés de los resultados de Moderna, los inversores en acciones de vacunas ya se estaban poniendo nerviosos por la viabilidad a largo plazo de este negocio. Los valores de las vacunas se vieron afectados el mes pasado después de que el fabricante de medicamentos Merck & Company (NYSE:MRK) dijera que un estudio había indicado que su pastilla reducía el riesgo de enfermar gravemente o morir a causa del COVID.
Transcurridos veinte meses de la pandemia, el éxito del lanzamiento de la pastilla contra el COVID-19 podría acelerar y ampliar la recuperación mundial, disminuyendo el atractivo de las acciones de la vacuna.
El Reino Unido se convirtió ayer en el primer país en autorizar la terapia casera de Merck.
El Secretario de Sanidad del Reino Unido, Sajid Javid, dijo en un comunicado:
"Esto supondrá un gran hito para los más vulnerables y los inmunodeprimidos, que pronto podrán recibir este innovador tratamiento".
Vacunas frente a terapias
Además de la pastilla de Merck, están surgiendo otros competidores y posibles terapias que podrían lastrar las ventas de los principales productores de vacunas, como Moderna, Pfizer y Johnson & Johnson (NYSE:JNJ). Un antidepresivo genérico y de bajo coste, por ejemplo, podría reducir el riesgo de que el COVID-19 lleve a un paciente infectado al hospital, según un estudio brasileño publicado en la revista Lancet Global Health.
En el mayor ensayo clínico que ha evaluado el efecto del antidepresivo sobre el COVID-19 hasta la fecha, los pacientes que recibieron fluvoxamina mostraron una probabilidad considerablemente menor de requerir hospitalización que los que no la recibieron, según un informe del Wall Street Journal.
India, uno de los mayores productores de vacunas, está ampliando rápidamente sus exportaciones tras sus últimos contratiempos debido al aumento de la demanda en su país. La Organización Mundial de la Salud concedió esta semana una autorización de emergencia para una vacuna contra el COVID desarrollada conjuntamente por la agencia de investigación médica de la India y el fabricante local Bharat Biotech International Ltd. La aprobación de la OMS podría acelerar la reanudación de los envíos de vacunas desde la India, que detuvo las exportaciones en abril para dar prioridad a sus propios ciudadanos ante una segunda ola letal de coronavirus.
Según Matthew Harrison, analista de Morgan Stanley (NYSE:MS), las vacunas siguen siendo la principal medida de prevención y la mejor oportunidad de mercado, pero no está claro cuál será el volumen de este mercado.
La previsión de Harrison sobre las ventas anuales de vacunas contra el coronavirus a largo plazo oscila entre 3.000 y 30.000 millones de dólares. Asigna calificaciones de igual peso para Pfizer y Moderna.
Conclusión
Creemos que los mejores días para ganar dinero con las acciones de las vacunas son ya cosa del pasado. El aumento de la oferta de vacunas, desde los productores de bajo coste como la India hasta la autorización de pastillas antivirales como la que ha desarrollado Merck, seguirá lastrando las ventas de los productores de vacunas occidentales, incluidos Moderna y Pfizer.