Hoy os acercamos unos pensamientos muy certeros que nos envió Axel Forreiter, compañero en el mundillo del trading y además profesional e instructor de Judo and Jiu-Jitsu. Esperamos que disfrutéis de su lectura puesto que resume perfectamente la esencia del trading. Dice así:
Mucha gente cree que los campeones de los deportes de lucha (judo, jiu-jitsu, boxeo, kick-boxing, MMA, etc. etc.) han llegado a donde están porque tienen unas cualidades físicas y un nivel técnico muy superiores respecto al resto de luchadores. Esto es cierto, pero sólo en parte. La preparación técnica y física es imprescindible para obtener buenos resultados en competición, pero hay un elemento crucial que distingue a los campeones del resto: la preparación psicológica.
n este sentido, la lucha y el trading son paralelos ya que, si bien existen cientos de sistemas potencialmente “ganadores”, solo unos pocos traders logran una rentabilidad consistente y esto lo consiguen gracias lo que algunos denominan psicotrading. En mis años de experiencia como competidor y entrenador de artes marciales he trabajado el aspecto psicológico de la competición en los deportes de combate y ahora aplico este trabajo a mi aprendizaje en el trading. En este artículo me gustaría compartir con vosotros la idea central de la psicología de la competición ya que puede ser muy útil para avanzar en el trading.
Pocos meses después de haber iniciado mi camino en el trading y tras haber perdido parte de mi cuenta, empecé a entender aquello de que “un trader no es ganador por su sistema sino por como lo aplica”. Aprendí que, al igual que en el deporte, un factor determinante del éxito o el fracaso en el trading es el estado psicológico en el que nos encontramos al aplicar la técnica.
De la misma manera que un luchador experto puede ser presa del miedo y perder ante un adversario más novato, al aplicar nuestros sistemas de trading, podemos ser víctimas de nosotros mismos y cometer errores que mermen la cuenta. Esto sucede porque los miedos nos hacen modificar la aplicación de la técnica que conocemos.
Más adelante, al iniciar mi formación, pude ver operar a traders profesionales y pude comparar mi estado psicológico con el de estos traders durante la operativa. Por un lado, vi en mi mismo una actitud típica de muchos luchadores principiantes a los que entreno; estos luchadores dejan que sus ansias por mejorar y obtener resultados se conviertan en una fuente de presión que no hace más que frenar su progreso. Por otro lado, pude ver la calma que mantenían los traders profesionales durante una sesión y entendí que es una actitud paralela a la de los buenos luchadores durante una competición.
Es habitual que las ganas por obtener resultados (es decir, por ganar) pronto provoque un estrés contraproducente. Es innato en el ser humano querer obtener resultados lo antes posible. Esto se acentúa en actividades como el trading o los deportes de competición, donde el alumno suele invertir un gran esfuerzo y deposita grandes esperanzas por llegar al objetivo marcado. Y el hecho es que no podemos hacer desaparecer este sentimiento, no podemos dejar de querer ganar.
Es por eso que, como entrenador, no intento eliminar este sentimiento en mis alumnos, sino modificarlo. Intento que el objetivo deje de ser el acumular victorias puntuales y que, en su lugar, los alumnos se centren en un objetivo mayor: avanzar en un proceso de aprendizaje que engloba el entrenamiento y la competición y que busca únicamente la superación personal.
El éxito está en el proceso, no en el resultado. Este es un concepto contraintuitivo, pero que, una vez interiorizado, se convierte en una pieza clave de nuestro aprendizaje ya que cambia por completo las coordenadas de nuestro camino. Las victorias y las derrotas dejan de ser éxitos y fracasos y pasan a ser guías que nos marcan el camino del verdadero éxito: ser mejores cada día en nuestra actividad.
Interiorizar este concepto es lo que aporta a traders y luchadores ganadores la calma que observamos durante la operativa o antes y después de un combate. Esto es porque entienden que estas situaciones no son momentos cruciales en los que serán juzgados, criticados o alabados, sino que son diversas fases del proceso de aprendizaje continuo. Cuando entendemos esto, perdemos el miedo a la derrota y empezamos a ganar siempre ya que, cuando perdemos, aprendemos y esto supone un avance en nuestro camino.
Si sabemos que el éxito está en el proceso y no en el resultado, aceleramos nuestro aprendizaje ya que cada experiencia, cada victoria y cada derrota puntual adquiere valor. Al no enfrentarnos a nadie más que a nosotros mismos, abandonamos el ego. Nos es más fácil rodearnos de gente con más experiencia que nosotros y no envidiarlos sino admirarlos y aprender de ellos.
Cuando nos comparamos con ellos y vemos que lo hacemos peor, no nos fustigamos pensando que lo hacemos mal si no que nos motivamos para seguir avanzando porque entendemos que si otros han llegado ahí, nosotros también podemos.
Estas ideas son las que me han llevado a avanzar en mi carrera deportiva y ahora me ayudan a avanzar en el trading. Por esto, cuando me siento frente a las pantallas cada mañana me repito una frase que siempre digo a los luchadores a los que entreno y que sirve también para el trading: “al combate (y al trading) se viene ya ganados de casa”.