En el mundo del trading, la suerte es uno de esos conceptos que siempre genera debate.
Recuerdo que cuando empecé, pensaba que todo dependía de tener la estrategia perfecta, el conocimiento adecuado y mucha disciplina.
Pero con el tiempo, me di cuenta de que la suerte también juega su papel, aunque nos cueste aceptarlo.
¿Existe realmente la suerte en el trading?
Al principio, me negaba a creer que la suerte tuviera algo que ver con mis resultados.
Me gustaba pensar que todo lo que conseguía era fruto de mi esfuerzo.
Pero con el tiempo, aprendí que hay un factor incontrolable que puede marcar la diferencia entre una operación ganadora y una perdedora.
El mercado no siempre se comporta como esperamos.
Puedes analizar, esperar la entrada perfecta y aun así perder porque una noticia inesperada movió el precio en tu contra.
Eso no significa que tu análisis fuera malo, simplemente que hay cosas que escapan de nuestro control.
La suerte como parte del proceso
Aceptar que la suerte forma parte del trading ha sido uno de los aprendizajes más difíciles para mí.
Pero también ha sido uno de los más liberadores.
Me ha ayudado a entender que no todo depende de mí y que lo importante no es ganar cada operación, sino tomar las decisiones correctas con la información que tengo en ese momento.
Recuerdo una operación en particular con el petróleo, uno de mis activos favoritos.
Había analizado todo a la perfección, la estructura, el volumen, la zona de demanda...
Todo indicaba que el precio debía subir.
Abrí mi posición con total confianza, pero justo después, una noticia inesperada sobre los inventarios hizo que el precio se desplomara.
Perdí la operación, pero no porque mi análisis fuera malo, sino porque la suerte no estaba de mi lado ese día.
He vivido días en los que el mercado parecía estar de mi lado, donde cada operación se cerraba con ganancias casi sin esfuerzo.
Pero también he pasado semanas donde, a pesar de hacer todo bien, las pérdidas se acumulaban.
La diferencia entre esos dos escenarios no era mi habilidad, sino la suerte.
Cómo convivir con la suerte sin depender de ella
Lo que he aprendido es que la suerte puede ayudarte, pero no debes depender de ella.
La clave está en tener una estrategia sólida que te permita aprovechar los momentos favorables y minimizar los daños cuando las cosas no salen como esperas.
La gestión de riesgo se convierte en tu mejor escudo contra la mala suerte.
No puedo controlar lo que hará el mercado, pero sí cuánto estoy dispuesto a perder en cada operación.
Esa mentalidad ha cambiado por completo mi forma de ver el trading.
Además, he dejado de obsesionarme con los resultados individuales.
Ahora miro mi rendimiento en bloques de 20 o 30 operaciones, porque sé que la suerte puede influir en el corto plazo, pero a la larga, lo que realmente importa es la consistencia.
¿Aliada o enemiga?
La suerte puede ser ambas cosas.
A veces te dará ese impulso extra que necesitas para cerrar el mes en positivo, pero otras veces te recordará que no todo está bajo tu control.
Lo importante es no dejar que te afecte emocionalmente.
Hoy entiendo que la suerte forma parte del juego, pero no define mi éxito.
Lo que realmente marca la diferencia es la disciplina, la paciencia y la capacidad de seguir adelante incluso cuando la suerte no está de tu lado.
Reflexión final
El trading es un equilibrio constante entre habilidad, disciplina y suerte.
No podemos controlar el mercado, pero sí cómo reaccionamos ante él.
Aceptar la suerte como parte del proceso me ha ayudado a soltar la frustración y a concentrarme en lo que realmente importa: tomar buenas decisiones una y otra vez.
Si hay algo que me ha enseñado el trading, es que la suerte puede abrirte la puerta, pero solo la constancia te permitirá quedarte dentro.