La semana pasada fue muy negativa para los selectivos del Viejo Continente, que perdieron cerca del 2%, dada la volatilidad del sector tecnológico americano, los desplomes del petróleo, y los datos macroeconómicos estadounidense, que siguen mostrando una desaceleración, en contra del escenario descontado tras la victoria de Trump.
El viernes se produjo un claro descenso del sector minorista americano, tras la compra de Whole Foods (NASDAQ:WFM) por parte de Amazon (NASDAQ:AMZN), lo que le deja en mejores condiciones para competir que el resto, dado su éxito de relacionarse con los clientes.
De esta forma, Wall Street cerró lejos de los máximos a los que apuntaba. El Dow Jones subió un 0,11%, el S&P 500, un 0,3%, y el Nasdaq, perdió un 0,22%.
Sin embargo, los futuros estadounidenses apuntan a una clara apertura en positivo esta tarde, especialmente, los del Nasdaq. Y este es uno de los grandes factores alcistas que tenemos a estas horas.
El otro lo encontramos en la contundente victoria de Macron en la segunda ronda de las elecciones legislativas en Francia, que deja atrás cualquier atisbo de incertidumbre política en el país vecino.
Y por supuesto, la tendencia de medio plazo sigue siendo fuertemente alcista, y el apetito comprador sigue dando muestras de estar presente, dentro de la tendencia de corto plazo que tenemos planteada desde hace semanas, que es lateral y de consolidación.
En Asia, el Nikkei ha subido con claridad, anotándose un 0,6%. Por su parte, la Bolsa de Shanghái ha subido un 0,4%.
En datos macroeconómicos, hemos conocido una subida del 10,4% de los precios inmobiliarios en China. Por su parte, el déficit de Japón ha quedado mucho peor de lo esperado.
No tendremos referencias destacables ni en Europa ni en EE.UU. durante el día de hoy, pero sí en los próximos días.
El petróleo recupera algo de terreno desde el viernes, subiendo cerca de un dólar. Sin embargo, desde el 25 de mayo, pierde cerca de un 13%, ante el fuerte aumento de la producción en EE.UU.
En divisas, tenemos que el EUR/USD está a las puertas del nivel de 1,12. Los malos datos macroeconómicos estadounidenses han colisionado con la subida de tipos de interés de la Fed y su mensaje posterior (más hawkish de lo esperado), por lo que el efecto neto es bastante neutral.
Hoy comienza la negociación del Brexit, lo que puede provocar también bastante volatilidad sobre la libra esterlina y sobre la Bolsa de Londres en las próximas semanas.
En resumen, las bolsas se recuperan hoy tras las claras caídas de la semana pasada. El Nasdaq parece tener mucho que decir en estos momentos, dada su gran influencia sobre el resto de índices. La consolidación dura ya un mes y medio en Europa, mientras que Wall Street sigue siendo más fuerte en el corto plazo.