Si miramos los gráficos en EE.UU. y Europa, nos podemos fijar en que los índices en el primero llevan dos semanas de retroceso bajista y por ejemplo en el Dax alemán, desde el ocho de febrero.
Se puede decir que febrero ha sido bajista, pero no debemos todavía hablar de una tendencia bajista, si de un retroceso bajista.
Al hablar de retroceso y no de tendencia, en un gráfico diario, hago mención a que venimos de una gran tendencia alcista, y por tanto lo que vemos es un parón de esa tendencia y por consiguiente viene un retroceso o mini-retroceso, para que sea tendencia tiene que ser mucho más profunda la corrección, y a día de hoy todavía no lo es.
Este matiz es muy importante, porque no podemos pensar que estamos a las puertas de grandes caídas que asusten a los inversores. Después de tanto meses alcista, casi un año en breve, que viéramos un retroceso algo profundo sería interesante para sanear los mercados y que nuevos inversores se pudieran sumar a la gran ola alcista que vendrá posiblemente durante unos años.
Se están dando varias circunstancias que hacen que los mercados entren en un sentimiento algo asustadizo, y no es otro que si tanta masa monetaria inyectada por los bancos centrales en diversas formas puede llevarnos a una gran inflación.
Inflación que ligeramente esta dándose ahora, pero que está alejada de esa otra inflación que viene por un gasto e inversión desmesurados por un aumento no solo de la masa monetaria y tipos bajos, sino porque las personas, las familias y las empresas ven que ganan mucho dinero y pueden endeudarse y gastar. Ya que pueden comprar más productos y servicios.
Y como digo, esta inflación será a futuro, la que tenemos hoy en día viene porque las materias primas después de estar unos años deprimidas empiezan a valorarse, bien por circunstancias propias de cada materia, como por el hecho de que los institucionales han entrado en juego para ganar dinero con este sector haciendo que sus precios aumenten.
Una de las consecuencias de tanto miedo al futuro es que se empieza a juzgar si hacen falta los estímulos de EE.UU. y los fondos europeos dado que las economías están creciendo, los fundamentales así lo van demostrando, como el hecho de que los beneficios empresariales son mejores de lo esperado cada trimestre.
Esta situación lleva a que la renta fija empiece a cobrar cierto interés ya que los bonos empiezan a tener que subir el tipo de interés para hacerlos atractivos y que el inversor los quiera. La explicación es sencilla, si se piensa que los tipos de interés serán subidos por los bancos centrales por la inflación a futuro, los bonos tendrán que subir los tipos, por eso, desde este instante se piensa en ese escenario y los bonos por ejemplo de 10 años de EE.UU. y Alemania están subiendo.
Esta semana veremos cómo se comporta el mercado ya que tenemos noticias macro importantes que pueden hacer volver el optimismo a los mercados. No tiene porque ser volver a máximos históricos pero sí a recuperar parte de lo perdido estas semanas.
Muy atentos a esas circunstancias y entender que si somos inversores globales podemos aprovechar las circunstancias siempre a nuestro favor, aunque a veces sea para no hacer nada y esperar. Ser inversor global es ser un todoterreno que se adapta a todos los espacios temporales y con distintas metodologías de inversión. Y ese es el camino que se debe aprender y seguir.
Recordar que el daytrading solo es una parte del camino, pero no todo, se queda incompleto, y solo cuando integras el swing y el longtrading es cuando realmente puedes empezar a pensar es cuestiones de libertad financiera y posteriormente en una independencia financiera, aunque a mi me gusta más pensar en una jubilación segura y sin problemas.