Estamos ante una semana importante para la libra esterlina, el Canciller debe presentar su discurso sobre el presupuesto anual. La libra se ha comportado bien en los últimos tiempos, la mejor divisa durante la semana pasada y las últimas dos sesiones. El presupuesto de esta semana se está centrando en el debate sobre si el canciller está llevando a cabo la estrategia correcta al centrarse en la austeridad. Mirando los números, hasta ahora el plan parece estar teniendo cierto éxito. La cifra de endeudamiento para el ejercicio fiscal en curso es probable que se sitúe sólo ligeramente por encima de las previsiones realizadas hace un año (pero todavía alrededor de un 8% del PIB). La economía ha tenido problemas con la contracción del PIB, de nuevo en el último trimestre del año pasado, pero las indicaciones para el trimestre en curso sugieren que el crecimiento subyacente es cuando menos modesto. Por otra parte, el vencimiento de la deuda en el Reino Unido es a más largo plazo que la mayoría de naciones europeas, con lo cual los fondos necesarios para financiarse son comparativamente más bajos.
La libra también se ha beneficiado ya que las divisas están teniendo una menor correlación con el ebb y el flujo del apetito por el riesgo, lo que ha reducido el interés en las divisas high yield (como el dólar australiano, el real brasileño y otros) y ha centrado la atención un poco más en los fundamentales subyacentes. Y aunque el Reino Unido tiene aún un largo camino por delante, con el Banco Central llevando a cabo nuevas operaciones de QE, existe una percepción de que en el aspecto fiscal están por delante de muchos otros. Está en manos del Canciller asegurar que esta percepción se mantiene una vez que presente sus planes para el próximo año.