Los inversores afrontan a partir de hoy una semana muy intensa en los mercados financieros occidentales tanto desde el punto de vista político como desde el económico. Así, la semana se inicia con el primer debate entre el candidato republicano, Trump, y la demócrata, Clinton, a la presidencia de los EE.UU.
De momento, los inversores vienen descontando la victoria de Clinton, lo que no quiere decir que en Wall Street estén muy entusiasmados con sus políticas. No obstante, consideran éstas como “predecibles”, algo que no ocurre con las del candidato republicano. Sin embargo, las encuestas a día de hoy están muy igualadas, de ahí la importancia del mencionado debate. Una victoria en el mismo de Trump creemos que tensionaría los mercados al no contemplar los inversores la posibilidad que finalmente se haga con la presidencia de EEUU.
Además, este fin de semana se han celebrado en España dos elecciones autonómicas. Los resultados, que han estado muy en línea con lo que adelantaban las encuestas, no terminan de clarificar el panorama político nacional. Es por ello que a partir de hoy los inversores se mantendrán atentos al “juego político” que esperamos se intensifique en las próximas semanas. De momento, y en nuestra opinión, no se pueden descartar unas terceras elecciones generales en diciembre, escenario que no sería positivo ni para la economía española ni, por tanto, para los mercados financieros del país.
Pero la semana también será muy intensa en lo que a la publicación de cifras macro hace referencia, comenzando hoy con la de los índices de clima empresarial en Alemania, correspondientes al mes de septiembre. Habrá que analizar en profundidad tanto la lectura del índice general, el que mide el clima empresarial en su conjunto, como el subíndice de expectativas, sobre todo dado que los últimos indicadores de actividad muestran una cierta desaceleración del crecimiento económico del país, hasta ahora la “locomotora” del crecimiento en la zona euro.
Además, hoy habrá que estar atentos a la intervención del presidente del BCE, el italiano Mario Draghi, ante el Comité de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo (en principio a las 16:05, hora española). Además de defender la política monetaria expansionista del BCE ante las críticas que está recibiendo, especialmente por haber situado los tipos de interés de referencia en negativo, es muy factible que Draghi vuelva a mostrar el compromiso de la institución para lograr alcanzar el objetivo de inflación que se ha marcado: cerca del 2%.
En este sentido, señalar que entre el jueves y el viernes se darán a conocer en la Zona Euro y en sus cuatro mayores economías: Alemania, Francia, Italia y España, las lecturas preliminares de septiembre de la inflación, que se espera muestren un ligero repunte de la misma.
Por su parte, y a lo largo de los próximos días, señalar que en EEUU se publicará una batería de cifras macro de cierta relevancia, que servirá para que los inversores se hagan una idea del estado por el que atraviesa esta economía, estado que será determinante para que la Reserva Federal (Fed) suba sus tipos de interés al menos una vez, tal y como está previsto, antes de que finalice el ejercicio
Así, hoy conoceremos el dato de ventas de nuevas viviendas de agosto; mañana (T:9202) la confianza del consumidor de septiembre y la lectura flash del PMI de servicios de septiembre; el miércoles los pedidos de bienes duraderos de agosto; el jueves la lectura final del PIB del 2T2016; y el viernes los datos de ingresos y gastos personales de agosto y la lectura final de septiembre del índice de sentimiento de los consumidores.
Muchas de estas cifras son buenos indicadores adelantados de actividad, que darán información sobre la fuerza con la que la economía estadounidense afronta el inicio del 3T2016. Ello sin duda tendrá impacto en unos mercados de renta variable que presentan unas valoraciones por lo menos exigentes.
Por último, señalar que esta semana se celebra en Argelia (miércoles 28) una reunión informal de los países de la OPEP. En principio, y según ha adelantado el ministro de Energía argelino este fin de semana, se tratará la posibilidad de que los miembros del cártel congelen la producción de crudo con el objetivo de equilibrar el mercado y subir los precios. Las diferencias políticas y económicas entre Arabia Saudita e Irán hacen complicado este acuerdo, ya que alguna de las partes deberá ceder.
Además, y aunque se logre un acuerdo para la congelación de la producción, el resultado del mismo no creemos que vaya a ser muy efectivo a medio plazo –no dudamos que en el corto plazo produzca un repunte del precio del crudo- ya que la OPEP ha perdido desde hace unos años su capacidad de ejercer como “moderador” del sector a manos de los frackers norteamericanos, los cuales en cuanto suba el precio del petróleo incrementarán su producción, lo que volverá a afectar negativamente al precio de esta materia prima.
Además, y en este sentido, destacar que una potencial congelación de la producción de la OPEP supondría que los países del cártel estarían dispuestos a perder cuota de mercado frente a los productores estadounidenses y canadienses, “píldora” dura de tragar para países como Arabia Saudita. De momento, y hasta la reunión, la variable precio del petróleo seguirá impactando en el comportamiento de la renta variable occidental, como hizo el viernes en Wall Street, mercado que cayó con fuerza lastrado por el fuerte descenso del precio del crudo.
Por tanto, es muy factible que todos los factores que hemos enumerado, de tipo político y económico, hagan que la semana sea “movidita” en los mercados de valores europeos y estadounidenses. La tendencia que adopten los mismos dependerá en gran medida del desenlace de temas como el debate presidencial estadounidense o el resultado de la reunión de la OPEP en Argelia. Para empezar, esperamos una apertura a la baja en los mercados europeos, siguiendo la estela dejada por Wall Street el viernes y por las principales bolsas asiáticas esta madrugada.