Las perspectivas de medio y largo plazo siguen siendo claramente favorables para el Dax. En el aspecto técnico, la tendencia sigue siendo alcista, superando niveles de resistencia y con las medias móviles de referencia cruzadas al alza.
El canal alcista que guía a los precios, desde noviembre del pasado ejercicio, sigue siendo la referencia más fiable en el aspecto técnico. Mientras que los precios no pierdan la parte baja de dicho canal, no podremos hablar de cambio de tendencia.
La nota negativa sigue siendo la gran diferencia existente entre el nivel de precios actual y el nivel de precios en el que se encuentra la media de 200 sesiones, 1.300 puntos de diferencia que por probabilidad deberían equilibrarse en la medida de lo posible.
Hay que vigilar muy de cerca la evolución que pueden tener los precios en el corto plazo por el doble techo dejado recientemente en los 12.875 puntos. Si los precios no consiguen perforar al alza dicho nivel, es muy probable que empecemos a ver cierta debilidad en los precios.
En el plano del corto plazo, podemos ver el doble techo que mencionábamos anteriormente dando paso a una consolidación de precios que se soporta por un apoyo en el 62% del Fibonacci del último impulso, como podemos observar en el siguiente gráfico.
La referencia más importante a vigilar será el nivel de soporte de 12.500 puntos. Si los precios pierden este nivel al cierre, podremos hablar de un cambio de tendencia, mientras que esto no ocurra, el objetivo seguiría siendo superar y consolidar resistencias actuales y proseguir con la tendencia alcista de medio plazo.
Los indicadores, en términos generales, no representan debilidad, más allá de ver cierta sobrecompra acumulada que ya está en proceso de descarga, por lo que no debería ser nada alarmante.