Tokio, 3 oct (EFE).- La agencia de calificación Moody's informó hoy de que mantiene sus perspectivas negativas para la banca japonesa, tal y como sostiene desde 2008, pese a que prevé un repunte económico nipón en la segunda mitad de este año.
Según un informe publicado hoy, la agencia, que rebajó a finales de agosto la deuda soberana de Japón y la calificación de emisiones a largo plazo de los principales bancos nipones, prevé un entorno operativo complicado para la banca, que deberá afrontar varios desafíos para mantener la demanda de préstamos.
En este sentido, Moody's afirmó, a través de su sucursal japonesa, que los bancos se verán presionados tanto por el intento de mantener la calidad de sus préstamos para las Pymes, que representan un 40 por ciento del total de sus créditos, como por su debilitada rentabilidad.
Durante la última década en Japón han disminuido los niveles de apalancamiento (endeudarse para financiar una operación), los tipos de interés son casi nulos y la gran competencia ha reducido los márgenes netos de interés, lo que debilita la rentabilidad de la banca, subrayó el informe.
Por lo tanto, los bancos nipones disponen solo de un pequeño colchón de ganancias para absorber las pérdidas, según Moody's, que ve complicado que se invierta esta tendencia a corto plazo.
Como contrapartida, la agencia de calificación norteamericana destacó la calidad del capital de los bancos japoneses, mejor capitalizados que muchos de los bancos internacionales, así como su financiación y su liquidez, "otros de sus puntos fuertes", señaló.
Moody's realizó este informe a través del análisis de 38 bancos japoneses, que representan la mitad de los 1.000 billones de yenes (9.57 billones de euros) en depósitos del sistema bancario nipón.
La agencia prevé un repunte en el crecimiento de Japón en la segunda mitad de 2011 motivado por incremento de la inversión pública como consecuencia del gasto para la reconstrucción tras el terremoto y el tsunami de marzo. EFE