Madrid, 9 ene (EFE).- Repsol pagará mañana a sus accionistas un dividendo bruto de 0,5775 euros por acción a cuenta de 2011, lo que supone un incremento del 10 % con respecto al abonado en 2010.
Para hacer frente a este pago, la petrolera deberá desembolsar unos 705 millones de euros, de los que 141 millones irán a Sacyr Vallehermoso, propietaria del 20 % de la compañía; 91,4 millones para CaixaBank (12,9 %) y 66,9 millones para Pemex, que tras el pacto con Sacyr controla el 9,4 %.
El pasado 30 de diciembre el Gobierno aprobó las nuevas retenciones que se aplican a las rentas del capital.
En concreto, las retenciones fiscales que se aplican a las retribuciones de los accionistas suben al 21 % desde el 19 % para importes hasta 6.000 euros, y al 25 % -desde el 21 % anterior- para importes comprendidos entre 6.000 y 24.000 euros.
A partir de esta cantidad, la retención será del 27 %. EFE