Washington, 10 jul (EFE).- El Fondo Monetario Internacional (FMI) aumentó hoy sus previsiones de déficit para Italia del 2,4 por ciento al 2,6 por ciento para 2012, al tiempo que pidió más esfuerzos para evitar una espiral de aumento de deuda y débil crecimiento.
En la presentación de su análisis anual bajo el llamado Artículo IV, el FMI recomendó hoy a Italia enfocar sus planes de ajuste para que promuevan el crecimiento, con la mejora de la productividad y la flexibilización del mercado laboral como puntos centrales.
El fondo felicitó a Italia por las medidas tomadas para hacer frente a la crisis, como la reforma del sistema de pensiones o los recientes planes de reducción del gasto.
El FMI señaló que espera que el país comience a salir de la recesión en los primeros trimestres de 2013, empujado por las exportaciones, aunque las previsiones del fondo mantienen que la economía italiana se contraerá este año un 1,9 %, mientras que 2013 cerrará finalmente con un leve retroceso del 0,3 %.
Además, el FMI actualizó al alza sus previsiones de déficit para Italia en 2012, que aumentó en dos puntos porcentuales hasta el 2,6 por ciento, con lo que sus cálculos de deuda pública se incrementaron hasta el 125,8 por ciento del PIB en 2012 y el 126,4 por ciento en 2013.
El FMI enfatizó la necesidad de que Italia se "comprometa a políticas prudentes a medio plazo para reducir los altos niveles de deuda pública y mejorar así la confianza".
"Para revivir el crecimiento se debe dar prioridad al aumento de la productividad y de la participación laboral, con la persecución de una consolidación fiscal que sea compatible con el crecimiento, así como la promoción de un sistema bancario más resistente y dinámico", indicó el FMI.
En una teleconferencia previa, Kenneth Kang, responsable de la misión del FMI en Italia, dijo que pese a que las exportaciones han contribuido positivamente, el terremoto de Emilia Romagna va a lastrar la producción industrial y al sector exterior en el tercer trimestre de este año.
Con respecto a la banca, el informe señala que el sector financiero italiano sigue sufriendo un acceso limitado a los mercados y mayores costes financieros, al tiempo que la exposición a la crisis de deuda soberana se ha incrementado. EFE