La Paz, 17 nov (EFE).- La empresa aceitera Fino, del Grupo Romero
del Perú, entró al mercado de valores boliviano con dos emisiones de
bonos por 35 millones de dólares y 70 millones de bolivianos (un
millón de dólares), con el objetivo de financiar planes de expansión
hasta 2011, informó hoy una fuente de esa firma.
El gerente administrativo y financiero de Fino, Guillermo Rubini,
expresó en declaraciones a Efe su satisfacción por los resultados
obtenidos en las dos emisiones realizadas ayer por la empresa "con
tasas muy competitivas".
La totalidad de los bonos emitidos fue colocada en un día. Entre
los inversionistas que participaron en la subasta estuvieron
administradoras de fondos de pensiones (AFP), empresas de seguros,
fondos de inversión, bancos y fondos financieros privados.
Rubini explicó que, a través de las emisiones, la aceitera busca
"refinanciar y financiar" inversiones realizadas en los dos últimos
años y que hará en las dos próximas gestiones por un monto total de
30 millones de dólares.
Precisó que la firma invirtió en 2006 ocho millones de dólares
para ampliar la capacidad de molienda de soja en su planta situada
en la población de Warnes, en la región oriental de Santa Cruz, de
750 a 1.500 toneladas por día.
Además, entre 2008 y 2009, la empresa ha invertido 12 millones de
dólares en la construcción de dos silos con capacidad para almacenar
50.000 toneladas de granos cada uno en la localidad oriental de
Pailón, en beneficio de los pequeños y medianos agricultores de la
zona.
Por otra parte, la empresa realizó una tercera inversión de
millón y medio de dólares para ampliar la capacidad de molienda de
girasol, de 400 a 500 toneladas por día, "también pensando en el
crecimiento agrícola" en Santa Cruz.
Adicionalmente, la firma incrementará con dos millones de dólares
la capacidad de producción en su planta de refinación en Cochabamba
(centro), donde se produce margarina, manteca, detergente y aceites.
También prevé instalar una nueva fábrica de jabones en esa región
para subir la producción de las actuales 550 toneladas mensuales a
1.500 toneladas, con una inversión de 1,8 millones de dólares, a fin
de ampliar sus ventas en el mercado local y exportar el producto a
Colombia, Chile, Perú y Ecuador.
El directivo indicó que el segundo objetivo de la firma al entrar
al mercado de valores es lograr un capital operativo para poder
pagar a los productores "al contado".
"Queremos conseguir más materia prima para moler más y así
incrementar los volúmenes y tener un mejor desempeño. Para eso
tenemos que tener muy buenas relaciones con los agricultores y eso
se logra pagándoles apenas entregan la mercadería", dijo.
Un tercer objetivo es disminuir sus costos financieros "y la
única forma de hacerlo es entrar al mercado de capitales", apuntó
Rubini.
"La empresa ha venido creciendo, ha aumentado su capacidad de
molienda, necesita más capital de trabajo para operar y necesita una
estructura financiera más sólida. Eso solamente se consigue con los
bonos porque las líneas de crédito de bancos locales son muy
limitadas", agregó. EFE