Copenhague, 22 ene (EFE).- El consorcio de telefonía
sueco-japonés Sony Ericsson perdió 836 millones de euros netos el
año pasado, frente a los 73 millones de pérdidas de 2008, debido a
la crisis económica mundial, informó hoy la compañía.
La pérdida bruta, incluyendo los gastos de reestructuración, pasó
de 83 millones en 2008 a 1.043 millones de euros en 2009, lo que
representa un aumento superior al 1.000 por ciento.
La pérdida operativa se multiplicó por 800 para situarse en 1.018
millones de euros.
Las ventas en ese período fueron de 6.788 millones de euros, un
40 por ciento menos que el año anterior.
Sony Ericsson vendió 57,1 millones de teléfonos móviles en 2009,
un 40 por ciento menos, y el precio medio de venta por unidad subió
de 116 a 119 euros.
En el cuarto trimestre del año, la pérdida neta se redujo un 11
por ciento, pasando de 187 a 167 millones de euros.
La pérdida bruta, incluyendo gastos de reestructuración, pasó de
261 a 190 millones de euros.
La pérdida operativa se contrajo un 31 por ciento y se situó en
181 millones de euros.
La facturación cayó un 40 por ciento, de 2.914 millones a 1.750
millones de euros.
El número de teléfonos vendidos descendió un 40 por ciento para
alcanzar los 14,6 millones, mientras que el precio medio de venta
por unidad fue de 120 euros, un euro menos que en el mismo período
de 2008.
Durante 2008, Sony Ericsson se aseguró fondos externos por valor
de 455 millones de euros para reforzar su balance y mejorar su
liquidez, de los que 350 millones han sido garantizados por las
compañías matrices al 50 por ciento y sólo se han utilizado por el
momento 255 millones del total.
Sony Ericsson informó de que continúa con su plan, iniciado a
mediados de 2008, para reducir costes por valor de 880 millones de
euros, calculando el regreso a beneficios en la segunda mitad de
2010.
Desde la puesta en marcha de este programa, la compañía ha
reducido su plantilla en 2.500 trabajadores, hasta 9.100 empleados,
y ha usado 339 millones de euros en gastos de reestructuración, que
se espera se mantendrán dentro de los 500 millones totales
calculados con anterioridad.
El presidente de Sony Ericsson, Bert Nordberg, destacó en un
comunicado la mejora experimentada por el consorcio sueco-japonés en
el último trimestre del año, que obedece a una actualización del
portafolio y a los efectos positivos de las transformaciones
impulsadas por la empresa.
"Las actividades de reducción de costes y reestructuración de
recursos son necesarias para construir una organización más ligera y
eficiente, capaz de afrontar las demandas de un panorama competitivo
cambiante", señaló Nordberg, confiado en que la empresa va por el
"camino correcto".
Sony Ercisson calculó que el mercado mundial de telefonía móvil
cayó un 8 por ciento el año pasado y que su cuota de mercado en el
cuarto trimestre era de aproximadamente el 5 por ciento.
Para 2010, el consorcio sueco-japonés pronosticó un ligero
crecimiento en la venta total de teléfonos móviles. EFE