MADRID (Reuters) - La incertidumbre por el conflicto institucional entre el Gobierno central y el catalán volvía a pasar factura a la bolsa española el lunes, mientras Siemens Gamesa (MC:GAM) se desplomaba tras revisar a la baja sus previsiones.
El Gobierno central rechazó por ambigua la respuesta institucional en la que el presidente catalán Carles Puigdemont no aclaró si se ha declarado o no la independencia y le emplazó a rectificar antes del jueves a las diez de la mañana, cuando vence el plazo para aplicar medidas extraordinarias sobre Cataluña.
Los analistas dijeron que la volatilidad continuará en tanto en cuanto no se aclare la situación en Cataluña.
En este contexto, con la mayor parte de sus componentes perdiendo posiciones, el Ibex cedió un 0,75 por ciento a 10.181 puntos, mientras que el paneuropeo Eurofirst 300 sumó un 0,07 por ciento.
Entre los valores del selectivo, los bancos se llevaron la peor parte, con descensos próximos al dos por ciento en BBVA (MC:BBVA) - con una amplia red de clientes en Cataluña - y en las entidades catalanas que recientemente acordaron sacar sus sedes de la región, Caixabank (MC:CABK) y Sabadell (MC:SABE).
Santander (MC:SAN) puso la orden discordante gracias a entradas de compras de última hora que le permitieron repuntar un 0,02 por ciento.
Pero el peor valor de la jornada fue Siemens (DE:SIEGn) Gamesa, que perdió más de un seis por ciento de su capitalización bursátil en la jornada tras lanzar un "profit warning" que, según analistas, puede afectar a la credibilidad de sus gestores.
Entre los valores de gran capitalización no financieros, Telefónica (MC:TEF) contribuyó decisivamente al descenso con una caída del 1,7 por ciento mientras que el blue chip por excelencia, Inditex (MC:ITX), perdió un 0,2 por ciento.
Fuera del Ibex, el grupo de medios Prisa (MC:PRS) se dejó más de un ocho por ciento tras anunciar un nuevo y complejo proceso de reestructuración y el comienzo de la sucesión de su presidente.
OHL (MC:OHL), en cambio, saltaba un 10 por ciento tras publicar El Mundo que el fondo australiano IFM ofrece más de 2.000 millones de euros por el negocio de concesiones de la atribulada constructora controlada por Villar Mir.