París, 7 nov (.).- El comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, subrayó hoy su voluntad de que la lista negra de paraísos fiscales que prepara la UE esté lista antes de finales de año, y dijo que se está examinando la situación de "una cincuentena" de países.
"Quiero que esa lista negra salga de aquí a finales de año", dijo Moscovici en una entrevista a la emisora France Info, e insistió en que será "la primera lista negra de paraísos fiscales preparada por la Unión Europea".
Al calor de la polémica sobre las revelaciones en la prensa de los llamados "papeles del paraíso", avanzó que se está "examinando la situación de una cincuentena" de países, aunque eso no significa que al final habrá 50 nombres, y que el objetivo es que "la lista sea extremadamente creíble".
El comisario europeo no se privó de criticar a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que actualmente sólo incluye una jurisdicción en su propia lista negra, Trinidad y Tobago: "no es serio. Tiene que haber más".
Hay otras seis (Anguila, Curaçao, Indonesia, San Martín, Turquía y las Islas Marshall) en una "lista gris" por respetar sólo "parcialmente" las reglas de intercambio de información elaboradas por el Foro Global sobre la Transparencia Fiscal que alberga la OCDE.
Preguntado por el caso de Holanda, que aparece en el disparadero de los "papeles del paraíso" por un montaje jurídico que ha permitido a empresas como Nike (NYSE:NKE) reducir drásticamente los impuestos que pagan por sus beneficios, Moscovici precisó que eso está ya prohibido por una directiva europea adoptada el pasado año, pero que todavía no está en vigor en ese país.
Por eso, en un mensaje dirigido a las autoridades holandesas, dijo que "la aplicación debe acelerarse".
El responsable de Asuntos Europeos también defendió otras dos propuestas para luchar contra las estrategias de empresas y particulares para eludir el fisco: obligar a que los intermediarios financieros sean transparentes sobre los montajes que ofrecen a sus clientes y publicar el reporte país por país que ya existe sobre los activos declarados en un país diferente al del domicilio fiscal.
Sobre esta última, reconoció que "suscita reticencias".