Ello se refleja en la fuerte caída que los países han observado en sus exportaciones. Con el sector industrial golpeado por la crisis, el mercado laboral latinoamericano percibe el impacto.
En este sentido, durante el primer trimestre del año, la tasa de desempleo en latinoamérica registró un incremento de 0,6 puntos porcentuales en relación al mismo trimestre de 2008. A finales de marzo, la región sumó un millón de nuevos desempleados según la información divulgada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En el primer trimestre del año, la tasa de desempleo alcanzó al 8,5% de la Población Económicamente Activa (PEA), cuando un año atrás se ubicaba en el 7,9% de la PEA.
Las perspectivas para lo que resta del año son negativas en el ámbito del mercado laboral. Se espera que la tasa de desocupación continúe al alza y se ubique en un rango de 8,7% a 9,1%.
Los gobiernos latinoamericanos han lanzado planes de estímulo económico que si bien no pudieron evitar este fuerte deterioro en las condiciones laborales, han impedido que se agrave aún más la situación.