Bogotá, 24 ene (.).- La economía de América Latina crecerá el 1,7 % este año y el Producto Interior Bruto (PIB) de la región se expandirá un 2,5 % en 2019, según proyecciones presentadas hoy por el BBVA (MC:BBVA).
El economista jefe del BBVA Research para América del Sur, Juan Ruiz, señaló que el 2017 fue el "punto de inflexión" para que los países latinoamericanos consoliden "un cambio de tendencia" en positivo después de cinco años de "recesión".
El fortalecimiento del crecimiento mundial, el aumento de precio de las materias primas y un renovado impulso de la inversión tanto privada como pública en la región son las principales causas que potencian la reactivación económica.
Esta nueva dinámica llevaría a América Latina a alcanzar su potencial, que es de cerca del 3 % de crecimiento en 2019 y 2020, aunque este será menor que el de la década entre 2003 y 2013.
La entidad bancaria también elevó su previsión de crecimiento de la región en un 0,1 % para el 2018 con respecto a sus predicciones del último informe, publicado hace tres meses.
El crecimiento de todos los países latinoamericanos fue revisado a la alza con respecto a esas últimas predicciones, con la excepción de la de México y Colombia, que se mantuvieron estables, y la de Perú, que se rebajó en 4 décimas debido a la inestabilidad política actual.
Según el estudio del BBVA, los países más dinámicos de América Latina en los próximos dos años serán Argentina, Paraguay, Perú y Uruguay, mientras que Brasil, Chile y Colombia son los que presentarán un crecimiento más alto respecto a su cifra actual.
La entidad bancaria también prevé que la inflación se mantenga "contenida" y "dentro de las metas de los bancos centrales", con la excepción de Argentina y México, aunque en ambos países la inflación se irá reduciendo a lo largo de 2018 y 2019.
Además, los tipos de cambio se depreciarán de manera moderada en las monedas de los países latinoamericanos, menos el peso mexicano y el colombiano.
Ruiz explicó que las previsiones del BBVA se hicieron sin tener en cuenta los posibles resultados del ciclo electoral que vive América Latina, aunque reconoció que las elecciones "sí podrían afectar" al crecimiento económico de la región si se alteran "políticas económicas clave".