Lisboa, 25 jul (.).- Los beneficios de la portuguesa Redes Energéticas Nacionales (REN) cayeron el 22,9 % en el primer semestre del año hasta los 48,6 millones de euros, debido al efecto negativo que tuvo sobre sus cuentas la nueva regulación en el sector de gas.
REN explicó en un comunicado que también ha tenido un impacto en sus cuentas su situación internacional, tras los beneficios extraordinarios de 2023.
El ebitda (resultado bruto de explotación) también sufrió un retroceso en los seis primeros meses de 2024 del 2,7 % hasta los 257,8 millones de euros.
Los costes operacionales disminuyeron hasta los 93,8 millones de euros (un 1,4%), pese al crecimiento de su actividad y del número de colabores de 737 a 774, en el marco de los esfuerzos para consolidar equipos y adecuar la estructura de la compañía a la descarbonización y el cumplimiento de las metas de transición energética.
Los gastos de capital alcanzaron los 135 millones de euros, lo que supone un incremento de 23,6 millones en comparación con el primer semestre de 2023, y estuvieron impulsados por las inversiones en la red eléctrica de Portugal para garantizar su conexión con nuevos centros productores de matriz renovable.
La deuda neta se situó en 2.679,8 millones de euros, mientras que el coste medio de la deuda subió hasta el 2,8%, frente al 2,4 % del mismo periodo del año pasado.
El consumo de energía eléctrica en el ámbito nacional creció el 1,6 % interanual, o el 2,5 % si se corrigen los efectos de las temperaturas y el número de días útiles.
La producción renovable abasteció el 82 % del consumo luso, el registro más alto en un primer semestre en los últimos 45 años.
En concreto, la producción hidroeléctrica supuso el 39 % del consumo, frente al 28 % de la eólica, el 9 % de la fotovoltaica y el 6 % a través de biomasa.
El gas natural supuso el 8 % del consumo y el 10 % restante es del saldo importador. En definitiva, el consumo de gas se redujo el 19 % interanual.
REN está participada en un 12 % por Pontegadea Inversiones (sociedad de Amancio Ortega) y en un 5 % por Red Eléctrica (BME:REDE) Española (REE), pero su mayor accionista es la china State Grid, con el 25 % del capital.
Además de Portugal, opera en Chile a través de Transemel y Electrogas.