Río de Janeiro, 24 nov (EFE).- Los contratos de asociación con el Estado para la explotación de petróleo en las reservas del presal, el horizonte de explotación en aguas muy profundas que Brasil descubrió en el océano Atlántico, dejarán al país 285.000 millones de dólares en 10 años, informó este miércoles el Gobierno.
El valor incluye los ingresos por regalías (92.000 millones de dólares), lo que se recaude por impuestos (77.000 millones de dólares) y las ganancias que deje la comercialización del petróleo que le corresponde al Estado por los contratos de asociación (116.000 millones de dólares), de acuerdo con las estimativas de la estatal Presal Petróleo (PPSA).
"Cuatro contratos están en producción actualmente y en septiembre, según nuestra última cifra, la participación del Estado en su producción era de 11.000 barriles de petróleo por día. Estamos hablando de tener un millón de barriles por día en diez años", aseguró Eduardo Gerk, presidente de la entidad.
De acuerdo con el ejecutivo, el escenario de aquí a diez años es "muy prometedor", ya que el 70 % de la producción acumulada hasta 2031 vendrá de zonas que ya fueron declaradas como comerciales.
Los campos del presal, los más productivos de la potencia suramericana, están ubicados en aguas muy profundas del Atlántico por debajo de una capa de sal de dos kilómetros de espesor.
La explotación de petróleo proveniente de las áreas del presal se rige por las normas de los contratos por asociación, modelo que prevé que se le entregue al Estado una parte de la producción de las empresas que se adjudiquen los derechos para explotar esas áreas.
El estudio de la PPSA consideró la producción de áreas que ya han sido contratadas y en las que la mayoría de los campos ya han sido declarados comerciales, lo que certifica la capacidad de extracción de petróleo en esas zonas.
Las estimativas prevén una producción de 8.200 millones de barriles de petróleo durante los próximos diez años bajo el régimen de asociación.
Así las cosas, el promedio de producción diaria en 2031 será de unos 3,5 millones de barriles diarios de petróleo (bpd), equivalente a dos tercios de la producción nacional estimada por la Empresa de Pesquisa Energética (EPE) para ese año.
En 2022, primer año del período analizado en esta edición del estudio, la cuota de petróleo del Gobierno será de 24.000 bpd, cuota que llegará a alrededor de un millón de barriles de petróleo por día en 2031.
Para el desarrollo de actividades en el horizonte de presal se prevén inversiones por 99.000 millones de dólares hasta el 2031, de los cuales unos 33.000 millones de dólares se destinarán a plataformas de producción, 37.000 millones de dólares a la explotación y exploración de pozos y 29.000 millones de dólares a sistemas submarinos.