Madrid, 13 feb (.).- El volumen de los activos en fondos de pensiones crecerá un 2,6 % en 2018, 3.000 millones, con lo que cerrarán el año con un patrimonio de 114.000 millones de euros, según las previsiones de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco).
La rentabilidad esperada para los fondos de pensiones es del 2,25 % este año, con unas aportaciones netas que se mantendrán en niveles similares a los registrados en 2017, como ha explicado hoy Inverco.
Por categorías, los fondos mixtos fueron los que mayor incremento protagonizaron, con cerca de 7.750 millones de euros más, hasta llegar a los 40.000 millones, mientras que los de renta variable aumentaron su patrimonio un 12 %.
En el total de las instituciones de inversión colectiva, la rentabilidad se situará entre el 1,5 % y el 2 %, con un patrimonio que podría alcanzar los 624.000 millones de euros.
En 2017, el patrimonio de estas instituciones aumentó un 17,7 %, hasta alcanzar los 463.886 millones, de los cuales 111.077 millones correspondieron a los fondos de pensiones, cuyo volumen aumentó el pasado ejercicio un 4 %, su mayor cifra histórica.
Por su parte, el número de partícipes de fondos de pensiones disminuyó en 2017, cuando las cuentas se situaron en 9,72 millones, mientras que en el total de inversión colectiva esta cifra subió hasta las 12,97 millones de cuentas.
La edad media de los partícipes se situó en torno a los 50 años, siendo la edad comprendida entre los 46 y 60 años donde se concentra la mitad de ellos.
Desde Inverco han señalado que se está viendo un proceso de cambio en cuanto a las preferencias de los inversores, ya que las carteras cada vez incluyen en mayor medida renta variable.
Respecto al ahorro de los hogares en España, durante 2017 continuó decreciendo hasta situarse la tasa en el 6,1 %, y se mantuvo el pasado año como uno de los países con menor nivel de activos financieros per cápita.
Sin embargo, a la hora de elegir un instrumento a través de cual canalizar sus inversiones, los españoles se decantan principalmente por fondos de inversión y de pensiones.
Así, las aportaciones brutas fueron en 2017 de 4.970 millones para el total de los planes, una cifra de la que hay que restar las prestaciones brutas, que fueron de 4.543 millones, con lo que las entradas netas ascendieron el pasado año a 427 millones, casi el doble que en 2016.