Davos (Suiza), 22 ene (.).- La ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha asegurado este miércoles en el Foro Económico de Davos que España no renuncia a poner en marcha su propia tasa digital, incluso si no se alcanza un consenso a nivel europeo o internacional.
En un encuentro con periodistas durante su visita a Davos, donde ha acudido junto con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, Calviño ha señalado que la posición del Gobierno es "absolutamente clara y coherente".
Es indispensable adaptar el sistema fiscal al siglo XXI, ya que no se puede tolerar, desde el punto de vista económico, político y social "que haya empresas que pagan sus impuestos donde perciben sus beneficios, y otras en cambio no".
Los nuevos servicios digitales, ha añadido, son un caso extremo de este desequilibrio, de ahí que haya que encontrar un buen sistema "para incorporar en nuestros sistemas fiscales la realidad de la revolución digital".
Si bien la ministra confía en que en el marco de la OCDE se alcance un principio acuerdo en junio, de modo que en 2020 haya una solución global, si ello no fuera posible "España tendrá que empezar a actuar en el ámbito nacional".
Lo que no es posible es que haya que renunciar a un sistema fiscal más justo y adaptado al siglo XXI, ha indicado.
Calviño ha recordado que ha habido conversaciones entre Francia y Estados Unidos sobre este asunto, pero ha enfatizado que se trata de una tasa que ya ha sido aprobada por el Parlamento francés, por lo que lo que se ha debatido es "cuándo y cómo" se pondría en marcha, no su eliminación.
España, ha reiterado, no renuncia a proponer ese impuesto digital sobre determinados servicios digitales, un compromiso incluido en el programa electoral.