Investing.com - Objetivo cumplido. El Ibex 35 ha podido con su resistencia de los 8.600 puntos y se queda a poco más de 50 puntos de su máximo anual, esos 8.724,60 alcanzados a finales del pasado mes de enero. Se despide hasta mañana en 8.671 tras anotarse un alza del 1,14%, sólo superada, en el Viejo Continente, por Milán.
Todos los principales parqués europeos han cerrado en positivo, animados tanto por la reactivación de las exportaciones chinas y alemanas como por el mensaje positivo lanzado por el Banco de Japón y por la confirmación de la triple A para la deuda alemana por parte de Fitch.
Wall Street, que ha abierto en positivo, ha ido variando hacia un signo mixto, tras conocerse que el número de solicitudes de subsidio por desempleo presentadas la semana pasada en Estados Unidos aumentó ligeramente. 5.000 personas más solicitaron esos subsidios, situando la cifra total en 333.000, un nivel cercano al más bajo en cinco años, según ha informado el Departamento de Trabajo.
El Nikkei, horas antes, ha cerrado a la baja, recortando un 1,59%, después de que el Banco de Japón haya anunciado que mantiene las actuales medidas de flexibilización monetaria, aunque sin anunciar ninguna nueva, y haya reafirmado su evaluación de la economía nipona que, al igual que anunció el mes pasado, "está empezando a recuperarse moderadamente". Con estos anuncios concluía la reunión de dos días del organismo, la misma jornada en que el Gobierno del país ha aprobado una reforma fiscal a medio plazo destinada a reducir el presupuesto del país en 17 billones de yenes (132.307 millones de euros) durante los próximos dos años.
Por su parte, el Banco Central Europeo en su boletín mensual de agosto, señala que las tasas de interés oficiales en la zona del euro, en su mínimo histórico del 0,5%, no se están transmitiendo a los países que realmente las necesitan a ese nivel, como Italia y España, en el sentido de que, allí los créditos que se conceden no reflejan esos bajísimos tipos de interés.
También ha marcado la jornada la sorpresa que han dado los datos de la balanza comercial de China. Tanto las importaciones como las exportaciones aumentaron en julio mucho más de lo pronosticado por los expertos. Las ventas al exterior se incrementaron un 5,1% interanual, y las importaciones un 10,9%. Esas cifras alejan los temores a una ralentización de la segunda economía del mundo.
Hoy se ha conocido que las exportaciones alemanas recuperaron en junio algo del terreno perdido, lo que supone un alentador indicio de recuperación de la mayor economía europea. Y, en cambio, la producción industrial en España presentó en ese mismo mes una tasa anual del -4,6%, tres puntos por debajo de la de mayo, según datos del INE.
En el mercado secundario de deuda se mantiene la tranquilidad. La prima de riesgo española sigue por debajo de los 290 puntos básicos, se ha enfriado hasta 285 a esta hora. El bono a 10 años ha descendido notablemente hasta el 4,53%. Retrocede también la prima de riesgo italiana, en 251 puntos al cierre de mercados.
En ese considerable descenso se ha apoyado el FTSE MIB italiano para despuntar un 1,83%. El Cac francés se anota un 0,64%, el Dax alemán un 0,70% y el FTSE londinense un 0,28%.
Únicamente cuatro valores del Ibex han cerrado en negativo. Amadeus es el farolillo rojo, se deja un 1,04%. La banca mediana ha vuelto a ser el motor del selectivo español, con Banco Sabadell, que se ha disparado un 9,70%, a la cabeza, seguido por Popular, que repunta un 6,09%.