Washington, 17 jul (EFE).- El director de la Oficina de Presupuestos de la Casa Blanca, Jack Lew, descartó hoy que Estados Unidos vaya a declararse en mora ante la falta de acuerdo por subir el límite de endeudamiento y señaló que la cuestión en "discusión es cómo" se hará.
"No creo que los líderes responsables en Washington vayan a llevar a la suspensión de pagos. Creo que todos los líderes del Congreso y el presidente han reconocido que debemos subir el techo de deuda y la cuestión es cómo", dijo Lew en una entrevista en la emisora de televisión ABC.
Lew reiteró el discurso del presidente Barack Obama acerca de la necesidad de un plan de reducción de déficit amplio que permita recortar cuatro billones de dólares en la próxima década.
Sin embargo, "si eso no puede suceder, si no hay una voluntad de trabajar conjuntamente, creo que los mercados entenderán que nos moveremos hasta donde podamos", reconoció.
"Es algo desafortunado que las cosas siempre tengan que llegar hasta el último minuto. A veces, no hay consecuencias. Pero ahora estamos en un lugar en el que el mundo nos está mirando y debemos solucionar nuestros asuntos", agregó Lew.
Durante la pasada semana Obama convocó diariamente a los líderes republicanos y demócratas en el Congreso para presidir las conversaciones sobre la subida del techo de la deuda, de 14,29 billones de dólares, que de no aprobarse obligaría a EE.UU. a declararse en suspensión de pagos el próximo 2 de agosto.
Obama instó a ambas partes a que le presentasen un plan creíble de reducción del déficit durante el fin de semana, pero las posturas parecen seguir aún muy alejadas, con los impuestos como principal tema de confrontación y no se han reportado avances en los últimos dos días.
Desde el bando republicano, el senador por Arizona, John Kyl, coincidió hoy en el mismo programa que Lew donde aseguró también que no habrá "suspensión de pagos", pero repitió la oposición frontal desde su partido, con mayoría en la Cámara de Representantes, a una reforma fiscal que incluya alzas impositivas.
"Los republicanos no vamos a acordar algo que dañe la economía. Y los impuestos que acaban con los empleos son dañinos para nuestra economía. Así que no habrá moratoria, pero si vamos o no a conseguir algo, depende del presidente y su obsesión con la elevación de impuestos", remarcó Kyl. EFE