Moscú, 5 nov (EFE).- La corporación General Motors (GM) no
informó por adelantado a la Casa Blanca sobre su decisión de
renunciar a la venta de su filial europea Opel, aseguró hoy John
Beyrle, embajador estadounidense en Moscú.
"La Administración norteamericana no fue informada con
anterioridad. Esta fue una decisión comercial del Consejo de
Administración de General Motors", dijo Beyrle, según la agencia
Interfax.
El diplomático considera que al cancelar la operación de venta de
Opel al consorcio integrado por la empresa canadiense Magna y el
banco estatal ruso Sberbank, GM "demostró que ve perspectivas de
crecimiento de la economía norteamericana".
El primer ministro, Vladímir Putin, criticó hoy la decisión de la
corporación estadounidense, al considerar que "habla sobre la
singular actitud de los socios estadounidenses con sus
contrapartes".
Además, se quejó de que GM "no advirtió de nada a nadie" y que
actuó con una política de "hechos consumados, pese a los acuerdos
alcanzados, los documentos suscritos".
Algunos diputados rusos han calificado de "política" la decisión
de General Motors y la vincularon con el temor a la entrada de
capital ruso en Opel.
Según los analistas, Rusia era uno de los principales ganadores
de la operación de venta de Opel, ya que le permitía acceder a la
tecnología de la marca alemana.
Precisamente, el recelo de General Motors a ceder a los rusos el
derecho a comercializar los automóviles Opel bajo su propia marca,
copiar soluciones técnicas y hacer modificaciones fue lo que alargó
las negociaciones durante varios meses.
Según el plan maestro de la operación a la que renunció GM,
Sberbank adquiría el 35 por ciento de las acciones de Opel y Magna
el 20 por ciento a cambio de unos 500 millones de euros, mientras
que GM se quedaría con el 35, y el restante 10 por ciento pasaría a
manos de los trabajadores. EFE