Tokio, 28 jul (EFE).- Más de medio centenar de empresas
participan desde hoy en la feria "Robotech" de Tokio, un evento que
muestra lo último en robots capaces de hacer labores de asistencia
social, tareas domésticas o actividades de ocio.
El evento, que se celebra hasta este viernes, está por primera
vez dirigido a mostrar los avances tecnológicos para hacer la vida
más fácil a una sociedad envejecida como la de Japón, uno de los
países con mayor esperanza de vida del mundo.
El Gobierno nipón estima que el mercado de los robots dedicados a
labores de asistencia a individuos crecerá en los próximos 25 años
hasta los 4,9 billones de yenes (unos 43.000 millones de euros).
En "Robotech" se exhiben invenciones como "QUINCE", un robot de
rescate que en Japón, donde los terremotos son frecuentes, está
pensado para localizar a seres humanos sepultados por barro o
escombros.
"QUINCE" tiene una cámara colocada en su cabeza y varios sensores
térmicos y de amoníaco para detectar la presencia de posibles
víctimas durante las labores de rescate.
Diseñado como un pequeño vehículo, este robot puede además hacer
llegar alimentos o agua a las víctimas aisladas en lugares que en un
primer momento son inaccesibles para los servicios de emergencia.
La feria también muestra máquinas como "AIST", una especie de
patinete de dos ruedas para labores como ir a la compra, ya que
puede transportar bolsas pesadas y seguir a su propietario gracias a
sensores.
Aunque el de los robots de asistencia se presenta como un jugoso
mercado, su desarrollo está todavía en fase preliminar, dijo a Efe
Naoki Shibatani, de la empresa de electrónica y robótica Vstone.
Esta compañía, cuyos androides han sido reconocidos en numerosas
ocasiones en concursos internacionales de robótica, presenta en la
feria varios robots, entre ellos uno que baila y juega a fútbol y
otro capaz de atender a clientes en centros comerciales.
Shibatani indicó que las últimas tendencias en el sector son las
de los robots que se utilizan en ocio y educación.
En este campo figura, por ejemplo, el robot "Chapit", de cuerpo y
cabeza redondos y que, con sus grandes orejas, es capaz de reconocer
voces y responder a distintas frases en tres idiomas diferentes.
Por el momento está en fase de desarrollo, pero el objetivo es
que el pequeño "Chapit" sea capaz, en un futuro, de reconocer a las
personas gracias a las cámaras colocadas en los ojos y cumplir
órdenes como encender la luz o la televisión gracias a sus sensores.
EFE
yk-mic/psh/pam