Oviedo, 30 jun (.).- La sociedad C6 WtE Ireland1 Holdings (participada por las estadounidenses Gen2Power, Green Waste Energy y la irlandesa Glanpower) ha encargado a la ingeniería asturiana TSK el diseño, suministro y puesta en marcha de una planta de pirólisis de residuos en Irlanda por valor de 65 millones de euros.
Según ha informado la empresa, la nueva planta, ubicada en el condado de Offaly, procesará 75.000 toneladas de residuos al año suministradas por el gestor semi-estatal irlandés Bord na Móna y será la mayor que se diseña en el mundo a escala industrial para generar energía a partir de los residuos procesados.
El proyecto, con un plazo de ejecución de veinte meses, integra tecnología de proceso de conversión a alta temperatura y en ausencia de oxígeno para transformar el residuo en un gas sintético apto para su uso en motores de combustión interna, una tecnología diferenciada de la incineración.
La planta incluye un sistema de limpieza de gases mediante el cual se eliminan los aceites, los alquitranes y las dioxinas y una pequeña fracción del gas limpio se utilizará para mantener el proceso estable mientras que el resto se destinará a la generación de electricidad.
Con 10 megavatios de capacidad instalada, la energía generada en la planta será inyectada en la red eléctrica irlandesa, y remunerada basándose en el acuerdo de compraventa de energía a largo plazo firmado con Naturgy (MC:NTGY) Ireland.
El proyecto busca dar respuesta a la saturación que registran los vertederos de la isla y TSK espera que cuente con una segunda fase en la que se aumentará la capacidad de procesado de la planta y se incluirán líneas de separación previa de residuos que permitan su valorización.