Sídney (Australia), 5 ago (EFE).- Los mercados bursátiles de Nueva Zelanda y Australia han cerrado hoy con fuertes caídas ante los redoblados temores a una nueva recesión en Estados Unidos y al contagio de la crisis de deuda en la zona del euro.
Wall Street desenterró los miedos la víspera cuando protagonizó su mayor caída desde 2008 y se deprecio un 4,31 por ciento.
El índice NZX 50 del parqué neozelandés retrocedió este viernes 101,21 unidades, equivalentes a un 3 por ciento, y finalizó en 3.276,51, mientras que el indicador NZX All Index cedió 22,65 puntos, equivalentes 2,92 por ciento, para situarse en 752,10.
En Australia, el ASX 200 descendió 171,1 enteros, equivalentes a un 4 por ciento, y acabó en 4.105,4.
Y el indicador All Ordinaries bajó 183,2 activos, equivalentes a un 4,21 por ciento, y cerró en 4.169,7.
Los expertos han calculado que las compañías inscritas en All Ordinaries han perdido en esta jornada un valor equivalente a unos 53.000 millones de dólares australianos (55.446 millones de dólares o 39.222 millones de euros), según la radio australiana ABC.
Esto se suma a las pérdidas de 65.000 millones de dólares australianos (68.243 millones de dólares estadounidenses o 48.279 millones de euros) de las tres sesiones anteriores.
La caída de la Bolsa de Valores australiana hoy ha sido la mayor desde el 20 de noviembre de 2008.
Ante el nerviosismo en los mercados, el secretario del Tesorero de Australia, Wayne Swan, organizó una rueda de prensa para asegurar que "hay una gran diferencia entre la situación en Australia y las de Europa y Estados Unidos".
"Australia nunca debe olvidar que nuestras credenciales económicas están entre las más fuertes del mundo industrializado", afirmó Swan en una rueda de prensa en Brisbane, capital del estado de Queensland (noreste). EFE