Dublín, 30 jul (EFE).- El Banco Central irlandés pronosticó hoy
que el Producto Interior Bruto (PBI) crecerá durante este año un 0,8
por ciento, aunque advirtió de que la tasa de desempleo no comenzará
a bajar hasta bien entrado el 2011.
En su último informe trimestral, la entidad financiera revisa al
alza sus previsiones económicas, ya que el pasado mes de abril
pronosticaba un crecimiento negativo del 0,5 por ciento del PIB.
El Banco Central atribuye ahora la mejora en las perspectivas de
la economía nacional a la recuperación de las exportaciones, sobre
todo las de las multinacionales que operan en la isla.
Por contra, el Producto Nacional Bruto (PNB), que excluye los
beneficios de las compañías extranjeras, caerá un 1 por ciento,
medio punto menos que lo esperado en el anterior análisis.
Para el siguiente año, el Banco Central continúa siendo optimista
al prever que la economía crecerá entre un 2,2 y un 2,8 por ciento
al hilo de la estabilización del sector bancario, del ajuste de las
cuentas públicas y del repunte de la competitividad.
Entre los factores que amenazan la recuperación nacional, la
entidad destaca la inestabilidad de los mercados financieros
internacionales y los altos niveles de deuda que acumulan algunos
países, así como el fantasma del desempleo.
Con una tasa de paro del 13,4 por ciento, el Banco Central confía
en que las políticas gubernamentales en esta materia comiencen a dar
frutos el próximo año, cuando podría situarse en torno al 13 ó 13,3
por ciento. EFE