MADRID, 10 ene (Reuters) -El Gobierno español está trabajando en una normativa para limitar el precio de venta al público de las pruebas de antígenos para el COVID, dijo el lunes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, después de que el mes pasado se registrara escasez en muchas farmacias del país.
El encarecimiento de las pruebas de antígenos en España durante la oleada de la variante ómicron del coronavirus y la escasez de pruebas en las farmacias han suscitado las protestas de políticos de la oposición y de grupos de consumidores, muchos de los cuales piden que se permita su venta en los supermercados.
"El debate que teníamos antes y durante las Navidades ha sido sobre todo la oferta de esos test, existía un cuello de botella, había un aumento exponencial de la demanda de los tests de antígenos pero no así de la oferta de los mismos", dijo Sánchez en una entrevista con la emisora de radio Cadena SER. "Este tema ya ha sido resuelto, y ahora efectivamente meteremos control de los precios de los tests".
Es posible que haya llegado el momento de utilizar parámetros diferentes para hacer un seguimiento de la pandemia, dijo Sánchez, citando la disminución de la letalidad del COVID-19. Confirmó un artículo del periódico El País según el cual las autoridades estaban considerando la posibilidad de introducir una vigilancia de la pandemia de forma similar a la de la gripe, sin registrar todos los casos ni hacer pruebas a todas las personas sintomáticas.
La tasa de contagio en todo el país, medida en los últimos 14 días, se elevó el viernes a un nuevo récord de 2.723 casos por cada 100.000 habitantes, lo que supone un aumento de más de 10 veces desde principios de diciembre. La ocupación de los cuidados intensivos alcanzó el 22,06%, frente al 8% de hace un mes, pero sigue siendo menos de la mitad del máximo del 43% registrado hace un año.
La líder de la oposición de centro derecha, Inés Arrimadas, afirmó el lunes que una liberalización del mercado de las pruebas de antígenos sería más eficaz que una limitación de los precios.
"Cerca de aquí, en Portugal, la gente puede comprar tests en el supermercado", dijo a los periodistas.
Las pruebas de antígenos se venden por unos 3 euros (3,40 dólares) en la vecina Portugal, mientras que en España cuestan unos 10 euros, donde sólo se pueden adquirir en las farmacias, dijo Arrimadas.
España comprará 344.000 dosis de la píldora antiviral COVID-19 de Pfizer (NYSE:PFE) en enero, según anunció también Sánchez el lunes.
Paxlovid, destinado a los adultos que tienen una infección de leve a moderada y corren un alto riesgo de que su enfermedad empeore, es más eficaz cuando se toma durante las primeras fases de COVID-19, antes de una eventual hospitalización.
(Reporte de Inti Landauro; edición de Clara-Laeila Laudette y Ed Osmond, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)