MADRID, 22 dic (Reuters) - Las familias españolas podrán celebrar la Navidad reunidas, dijo el miércoles el presidente del Gobierno antes de encontrarse con los dirigentes regionales para debatir las formas de contener la variante ómicron del coronavirus, que se propaga rápidamente.
Con casi el 80% de su población vacunada y un programa de refuerzo que va ganando terreno, España se ha librado en gran medida de la ola de infecciones que llevó a varios países del norte de Europa a endurecer los controles en otoño.
Sin embargo, la llegada de ómicron ha disparado las cifras, con un récord de casi 50.000 nuevos contagios el martes, aunque los ingresos hospitalarios y los casos de cuidados intensivos siguen siendo bastante reducidos en comparación con anteriores oleadas de COVID-19.
"No se preocupe, las familias podrán celebrar las Navidades", dijo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a un parlamentario. "España ha resistido, no se ha vencido y está avanzando".
La variante ómicron representa alrededor del 47% del total de las infecciones en España, según los datos publicados el martes, lo que supone un aumento de apenas el 3% de la semana anterior.
Sánchez convocó una reunión de líderes regionales, responsables de su propia política sanitaria en el marco del sistema administrativo altamente descentralizado de España, en un esfuerzo por establecer un criterio coordinado para hacer frente al rebrote.
Sin embargo, las marcadas diferencias políticas entre los mandatarios hacen improbable un acuerdo a nivel nacional más allá de las restricciones más básicas.
En Cataluña, donde la ocupación intensiva duplica la media nacional, con un 30%, el gobierno regional ordenó el cierre de locales nocturnos, fijó límites a los grupos de personas y solicitó la aprobación judicial de un toque de queda nocturno, la medida más dura disponible sin un estado de excepción nacional.
Por el contrario, la líder madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que ganó unas elecciones aplastantes en primavera tras prometer pocas restricciones, se ha comprometido a mantener abierto el sector de la hostelería pase lo que pase.
(Reporte de Inti Landauro y Emma Pinedo; redacción de Nathan Allen, edición de Andrei Khalip y John Stonestreet; traducción de Flora Gómez)