MADRID, 7 abr (Reuters) - Las autoridades de varias comunidades autónomas españolas intensificaron el miércoles las restricciones frente a la COVID-19 para frenar la creciente tasa de contagios y evitar que se convierta en una cuarta ola.
Aunque España se encuentra en mejor situación que la vecina Francia, donde los contagios desenfrenados han hecho que las tasas de ingreso en los hospitales alcancen máximos de cinco meses, el número de casos diarios ha aumentado durante las últimas tres semanas.
La incidencia acumulada, que mide los casos diagnosticados por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, ascendió el martes a 165, frente a la de 128 de mediados de marzo, pero todavía está muy por debajo del máximo de 900 registrado a finales de enero.
Ante el temor de que el aumento de los contactos sociales durante las recientes vacaciones de Semana Santa pueda alimentar un mayor nivel de contagios, las autoridades del nordeste de Cataluña, fronteriza con Francia, anunciaron que volverían a imponer la prohibición de que los residentes viajen fuera de su comarca.
Esa restricción, vigente desde el viernes, se había levantado en las últimas semanas para permitir a los miembros de un hogar moverse libremente dentro de Cataluña, que el martes tenía una incidencia de 203 casos por cada 100.000 personas.
Las autoridades dijeron que los datos probablemente no reflejaban aún el impacto de las vacaciones de Semana Santa y advirtieron que las hospitalizaciones en unidades de cuidados intensivos estaban aumentando.
Las autoridades del País Vasco cerraron todos los viajes no esenciales dentro y fuera de la capital regional, Vitoria-Gasteiz, y la provincia de Álava, después de que la incidencia acumulada superara los 400 casos por cada 100.000 personas.
Se impusieron medidas similares en la pequeña ciudad de Tarazona, en la comunidad autónoma de Aragón.
Se espera que el Ministerio de Sanidad español aclare el miércoles las normas sobre el uso de mascarillas en las playas, después de que una nueva ley que obliga a su uso, incluso cuando se pueda garantizar el distanciamiento social, haya provocado una confusión generalizada.
(Información de Nathan Allen y Joan Faus; editado por Andrei Khalip y Bernadette Baum; traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdansk)