Por Doina Chiacu y Dan Whitcomb
WASHINGTON/ LOS ANGELES, 29 mar (Reuters) - El presidente Donald Trump prorrogó el domingo la recomendación a la población para que se quede en casa hasta finales de abril, abandonando su criticado plan para poner en marcha la economía a mediados de dicho mes, después de que un importante asesor médico afirmara que más de 100.000 estadounidenses podrían morir a causa del brote de coronavirus.
El cambio de opinión de Trump, sobre el que se darán más detalles el martes, se produce en un momento en que la cifra de muertes en Estados Unidos ha superado las 2.460 por la enfermedad respiratoria, según un cálculo de Reuters, con más de 141.000 casos, la mayor cantidad de cualquier país del mundo. (Gráfico: https://tmsnrt.rs/2w7hX9T)
"El pico, el punto más alto de la tasa de mortalidad, es probable que se alcance en dos semanas", dijo Trump en una reunión informativa sobre el coronavirus en el Jardín de Rosas de la Casa Blanca, flanqueado por los principales asesores y líderes empresariales. "Nada sería peor que declarar la victoria antes de que se consiga la victoria".
Trump dijo a los estadounidenses que "cuanto mejor lo hagan, más rápido terminará esta pesadilla".
El domingo, el doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, dijo a CNN que la pandemia podría finalmente matar entre 100.000 y 200.000 personas en Estados Unidos si los planes de contención no tienen éxito.
Desde 2010, la gripe ha matado entre 12.000 y 61.000 estadounidenses al año, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. La pandemia de gripe de 1918-1919 mató a 675.000 personas en Estados Unidos, según los CDC.
Fauci matizó sus desalentadoras predicciones en la conferencia de prensa del Jardín de Rosas, diciendo que se basaban en modelos que aplican el peor escenario posible si los estadounidenses no siguen las directivas de quedarse en casa.
"Creemos que la mitigación que estamos haciendo ahora mismo está teniendo un efecto", dijo Fauci. "La decisión de extender este proceso de mitigación hasta finales de abril es una decisión sabia y prudente".
La sorprendente sugerencia de Trump de que podría ordenar la reapertura de la economía para finales de Semana Santa había sido recibida con críticas por parte de los gobernadores de los estados que todavía se enfrentan a un número creciente de pacientes, con los sistemas sanitarios al límite de su capacidad.
Los gobernadores de al menos 21 estados, que representan más de la mitad de los 330 millones de habitantes de Estados Unidos, han cerrado las "empresas no esenciales" y han dicho a los residentes que se queden en casa.
Al preguntársele durante la sesión informativa si la idea de levantar las restricciones para mediados de abril había sido un error, Trump dijo que era "solo una aspiración", y que ahora creía que el país podría estar en camino hacia la recuperación económica para el 1 de junio.
(Información de Sarah N. Lynch, Doina Chiacu y Chris Sanders en Washington, Karen Freifeld en Nueva York, Tom Polansek en Chicago y Dan Whitcomb en Los Ángeles; escrito por Lisa Shumaker y Dan Whitcomb; editado por Daniel Wallis y Peter Cooney; traducido por Tomás Cobos)