Berlín, 23 mar (.).- El Gobierno alemán se mostró hoy aliviado por el hecho de que la UE haya sido excluida de los aranceles estadounidenses al acero, aunque recordó que esta medida es temporal y que será preciso negociar con Washington para lograr una solución para ambas partes.
El ministro de Economía, el conservador Peter Altmaier, aseguró que esta "muy contento y muy aliviado" porque haya sido posible "alcanzar una excepción para Europa en su conjunto" en este asunto, como han logrado también México, Canadá, Brasil, Argentina, Australia y Corea del Sur.
El ministro de Exteriores, el socialdemócrata Heiko Maas, indicó en declaraciones a los medios del grupo Funke que, si bien es una "buena noticia" este resultado, el "conflicto de fondo persiste".
El logro parcial de evitar, por lo menos hasta mayo, aranceles punitivos a las exportaciones de acero europeo a EEUU, demuestra que "cuando una UE comprometida habla con una voz se la escucha".
Sin embargo, la UE debe ahora "hasta principios de mayo" negociar una solución duradera con los representantes comerciales estadounidenses.
La UE debe defender ahora un "comercio basado en reglas" y "un sistema de comercio internacional multilateral", agregó Maas recordando que la Comisión Europea (CE) tiene las competencias en materia de comercio.
Tras intensas negociaciones en los últimos días, ayer entraron en vigor aranceles del 10 % y el 25 % a las importaciones de aluminio y acero, respectivamente, aunque con amplias excepciones.
El presidente de EEUU, Donald Trump, decidió finalmente dejar fuera de estas medidas a sus socios norteamericanos -Canadá y México-, así como a los países de la UE, a Australia, Corea del Sur, Brasil y Argentina.
China es la economía más afectada por los nuevos aranceles.